real zaragoza

Real Zaragoza: una vuelta en la enfermería

Tras la lesión de Valera, hasta 12 jugadores diferentes del Real Zaragoza han sufrido percances físicos desde el comienzo de la temporada.

Valera se marcha lesionado en el partido contra el Levante
Valera se marcha lesionado en el partido contra el Levante
Guillermo Mestre

La musculatura isquiotibial ha sido la gran protagonista de la primera vuelta del Real Zaragoza. No se trata de uno de los fichajes veraniegos de Juan Carlos Cordero, sino de la triada de músculos situada en la zona posterior del muslo y que une la cadera con la rodilla: el bíceps femoral, el semitendinoso y el semimebranoso. Las fibras de esa estructura anatómica, también denominada isquiosural, se le rompieron a Germán Valera el pasado miércoles en su desesperada carrera para evitar el primero gol del Levante en La Romareda. Estará de baja hasta mediado de enero, como mínimo. Este tipo de lesión, una de las más comunes en los futbolistas porque implica movimientos como los esprines, cambios explosivos de ritmo o desaceleraciones, ni mucho menos es aislada en la temporada del Real Zaragoza.

Una primera vuelta accidentada en la que, además de Valera, han sufrido lesiones de mayor o menor gravedad en esa región muscular varios compañeros más: Carlos Nieto, Francho Serrano, Fran Gámez, Lecoeuche, Cristián Álvarez y Toni Moya. Por si fuera poco, la plaga de dolencias en el equipo aragonés en estos primeros meses de campeonato se ha extendido también a otros jugadores y con otros diagnósticos: Luna, Azón, Bakis, Marc Aguado, Víctor Mollejo. En total, hasta 12 jugadores del Real Zaragoza han sufrido percances físicos desde el comienzo de la temporada, además de las leves molestias puntuales o enfermedades menores, como el proceso gripal que afectó a la titularidad de Marc Aguado en el último partido o el cuadro de gastroenteritis que condicionó hace un par de semanas a Sergi Enrich aunque no supuso su baja en el partido posterior.

Como se ve, la oleada de lesiones -apenas ha habido una semana libre de sobresaltos desde agosto- ha sido un elemento más del día a día de los entrenadores. Primero Fran Escribá y después Julio Velázquez han debido gestionar y adecuar sus planteamientos a esas circunstancias sobrevenidas. Si han afectado o no al rendimiento del equipo en su globalidad pertenece a otro capítulo de análisis, pues si algo se destacó desde el propio club a principios de temporada eran las anchuras y hechuras de la plantilla, más versátil, completa y variada para hacer frente a los problemas de este tipo que son habituales en todas las temporadas y en la mayoría de los equipos.

Lo cierto es que el Zaragoza se ha resentido especialmente en el lateral izquierdo y en la punta de su ataque debido a las lesiones concatenadas de Nieto y Lecoeuche y de Azón y Bakis, respectivamente. Además, de los 11 titulares de las primeras cinco jornadas victoriosas, ocho de ellos han sufrido percances: solo Jair, Francés y Maikel Mesa se han librado.

De los 12 jugadores afectados por lesiones, algunos de ellos han sido recurrentes: Lecoeuche, con tres lesiones diferentes, y Cristián Álvarez y Fran Gámez, con dos recaídas, aún han ampliado más las semanas de baja totales entre futbolistas de la plantilla aragonesa. Quien más lesiones suma es Lecoeuche. El francés ya arrastró una fascitis plantar en la pretemporada y luego, al reaparecer, sufrió una lesión en un aductor que le tuvo un par de semanas más de baja. Entre unas cosas y otras, acumula siete partidos sin estar disponible.

Por su parte, Cristian Álvarez se ha perdido once partidos ligueros como consecuencia de la lesión en los isquiotibiales y posterior recaída por forzar y precipitar su vuelta en el duelo contra el Eibar en el que cumplió el mínimo de partidos para prolongar su contrato una temporada más. También esa zona posterior del muslo, con una rotura de grado dos, se lesionó Fran Gámez antes de ese partido contra los vascos. El jugador ya había padecido una contractura antes de jugar contra el Mirandés. En total, se ha perdido cinco jornadas.

La lesión más grave la sufrió Nieto en la quinta jornada en Cartagena. Una avulsión del tendón proximal de la musculatura isquiosural que le obligó a pasar por el quirófano y a enfrentarse a 7-8 meses de recuperación. Ese día se lesionó también en los ‘isquios’ Francho Serrano, fuera durante dos meses de campeonato (ocho partidos). La misma musculatura mermó a Toni Moya antes de jugar en Burgos por culpa de una contractura. Se perdió ese partido y tampoco estuvo apto para enfrentarse al Oviedo. En Elche, mientras, no pudo jugar Marc Aguado por culpa de un problema en el cuádriceps. Y en Cartagena no estuvo disponible Marcos Luna por un golpe en el tobillo.

La delantera tampoco ha escapado a la espiral de dolencias. Bakis lleva ocho partidos fuera del equipo por una lesión de menisco que se está abordando con un tratamiento conservador. Y Azón también sufre una lesión en la rodilla a la que el club no le ha dado más concreción en el diagnóstico, pero que tiene al futbolista de baja desde hace un mes y que le ha apartado ya de cinco encuentros. Ya está muy mejorado, y ya ha realizado trabajo con el grupo, así que se espera que pueda regresar en el primer partido del año contra el Eldense. Y para culminar el listado de caídos, Víctor Mollejo. El atacante manchego, delantero centro de urgencia del equipo ante las bajas de Azón y Bakis, sufrió hace tres semanas una fractura ósea en la nariz. Una dolencia más que, no obstante, no le ha impedido seguir compitiendo, primero con una máscara protectora, y ahora sin ella.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión