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Curro Sánchez, un goleador en el radar del Real Zaragoza
Curro Sánchez, máximo artillero de Segunda gracias a 5 penaltis marcados, lidera al Burgos. Juan Carlos Cordero está al acecho de su contrato con final el próximo 30 de junio.
La exquisita zurda de Curro Sánchez manda en el reino del gol en Segunda División. El mediapunta del Burgos es el máximo artillero de la categoría, alimentado, eso sí, por sus cinco aciertos desde el punto de penalti. Sin esa puntería y pericia en las penas máximas, son Aketxe (Eibar) y Gaspar Campos (Sporting) los mejores goleadores en una temporada que confirma la devaluación de la especie en Segunda: lo crudo y duro que es ser delantero con exigencias del goleador en un ecosistema en el que la llama del gol la están encendiendo jugadores de la segunda línea, como Aketxe, Gaspar Santos, Gabri Martínez, Puado o el propio Curro. Incluso en el Zaragoza se produce este fenómeno: Maikel Mesa es su máximo anotador.
En el Burgos, la bandera la lleva Curro. El polivalente mediapunta -puede jugar también en ambas bandas o como segundo delantero- nació en la Palma del Condado (Huelva) el 3 de enero de 1996. Es paisano del histórico Miguel Pardeza, el hombre que levantó primero la Recopa de París, o de otro exzaragocista, este más efímero, Jesús Alfaro. Curro Sánchez se crió en la cantera del Sevilla y en su filial comenzó a destacarse como un volante ofensivo con facilidad para el gol. Buen rematador, con un golpeo fino, es un futbolista con ‘duende’, con una calidad tan torrencial como intermitente. Cuando juega, juega a lo grande, con libertad y cierta anarquía.
Así ha hecho carrera en la categoría después de salir del Sevilla, donde llegó a disputar media docena de partidos en Primera: Numancia -marcó 13 goles en una temporada allí-, Ponferradina, Almería -donde ascendió a Primera-… Y así llegó en 2022 al Burgos. Fue una operación llamativa, porque su cartel en Segunda División era notable.
Un buen contrato, con la condición de que fuera solo de dos años, le llevó allí. La temporada pasada, en un equipo poco apto para sus condiciones y que le exigía en defensa, metió 9 goles jugando escorado a la derecha. Este año, su proyección aún es mayor.
Con estos números, con su rendimiento actual y con un contrato en finalización el 30 de junio; será, la próxima primavera, con 28 años, uno de los nombres del mercado si no renueva en el Burgos. Y ahí entra Juan Carlos Cordero. El actual director deportivo del Zaragoza ya intentó llevarlo al Tenerife.
Es un jugador muy de su gusto, con los valores que prioriza: buenos números de gol o asistencia, experiencia y buen nombre en la categoría, versatilidad… Cordero ya lo tiene en seguimiento para la próxima campaña. Es uno de sus potenciales objetivos.
Sobre Curro Sánchez, ha puesto los ojos de su mano derecha en la secretaría técnica del Real Zaragoza, Alberto González, quien ya le acompañó en Tenerife y que está afincado en Burgos. Desde allí se mueve y trabaja para el club aragonés.
En total, Curro Sánchez acumula 37 goles en las últimas cuatro temporadas más 12 jornadas de la actual. Una cifra poderosa para un futbolista de segunda línea y que toma cuerpo de amenaza para el Real Zaragoza en su cita de Burgos. El peligro, en esta ocasión, tiene rostro.
