Educación

Dos de cada tres solicitantes de becas de comedor y libros se quedan sin la ayuda

Educación ha concedido 17.349 ayudas y ha denegado 33.932 peticiones por no cumplir los requisitos o no haber presentado toda la documentación. Las asociaciones de padres, indignadas con la resolución definitiva.

El comedor escolar de un colegio zaragozano
Dos de cada tres solicitantes de becas de comedor y libros se quedan si la ayuda
O. DUCH

La convocatoria de las becas de comedor escolar y libros de texto ya había hecho saltar las alarmas de las familias aragonesas, que consideraban que los requisitos económicos marcados por el Gobierno de Aragón para acceder a las mismas no se ajustaban a la realidad. El pronóstico se cumplió con la resolución provisional de estas ayudas -51.281 solicitudes y 15.429 becas otorgadas-, aunque las 9.000 peticiones que inicialmente parecían cumplir los requisitos económicos y quedaron pendientes de aportar la documentación que les faltaba podían hacer que la cifra ascendiera hasta los 24.000 beneficiarios.


En la resolución definitiva publicada este viernes, sin embargo, solo se han concedido 1.920 nuevas becas, por lo que tan solo el 20% de estas 9.000 solicitudes han sido finalmente aceptadas: 3.000 no presentaron alegaciones, 2.440 no presentaron todos los documentos pendientes y 1.640 finalmente no cumplían los requisitos. En total, solo 17.349 de las 51.281 peticiones registradas tendrán una ayuda de comedor escolar o libros, mientras que dos de cada tres solicitantes -33.932- se han quedado sin beca. El porcentaje de cobertura de las becas es todavía menor para las de comedor, ya que solo se han otorgado al 26% de los alumnos -4.904 de 18.809- que las pidieron, mientras que las de libros llegarán al 38% -12.445 de 32.472-.


Los representantes de las familias ya se han posicionado en contra de los resultados de esta convocatoria, pues consideran que las exigencias marcadas por Educación no se corresponden con las necesidades de los afectados y creen que la partida destinada a estos conceptos es claramente insuficiente. El primer objeto de crítica es la renta máxima exigida a los beneficiarios de las ayudas de comedor -para las de libros es el doble-, fijada con el denominado Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM): 6.390 euros anuales o 533 euros mensuales por unidad familiar.


“Para que una familia cumpla esos requisitos tiene que encontrarse por debajo del umbral de la pobreza”, critican desde la Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos de Aragón (Fapar), quienes creen que la DGA endureció “de forma incomprensible” los requisitos económicos para acceder a las ayudas, por lo que muchas familias que realmente lo necesitan se han quedado fuera: “El objetivo del departamento de Educación no era que las becas cubrieran las necesidades que existen, sino que no hubiera lista de espera como el año pasado”.


Desde la Federación Cristiana de Asociaciones de Padres de Alumnos de la comunidad (Fecaparagón) defienden el sistema utilizado -“es más justo este procedimiento que un reparto lineal de las ayudas como el que se hacía antes”- pero no las exigencias de renta impuestas “erróneamente” por el departamento de Educación. “La actual dotación de becas no cumple el precepto básico de satisfacción de las necesidades de la sociedad”, asegura Pedro Martínez, presidente de la federación, quien ha solicitado formalmente al Gobierno de Aragón una reunión urgente con participación de las familias, Educación y el Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS) para abordar este problema.


Los representantes de las familias de la escuela pública critican, además, la escasa cantidad destinada a las becas de comedor, cuatro millones de euros -el año pasado fueron tres y se ampliaron con otros tres, aunque no se usó todo el importe-, y, sobre todo, el hecho de que ni siquiera se haya agotado el dinero presupuestado. Según cálculos de Fapar, la concesión de 4.904 becas de comedor -teniendo en cuenta que el importe de cada una es de 750 euros- supondría un gasto de 3.678.000 euros, lo que significaría que no se gastarán 322.000 euros previstos para este uso.


Seis euros al mes para los beneficiarios

Aunque para el próximo curso se han eliminado las medias becas de comedor -el año pasado cubrían un 50% del importe total de este servicio- debido al gran número de ayudas que fueron rechazadas, ya que muchas familias ni si quiera podían pagar la otra mitad, todos los beneficiarios deberán pagar una pequeña parte de la factura. Las becas, de 750 euros -30 para la semana de jornada partida de septiembre y 90 mensuales entre octubre y mayo-, no cubren el precio total del comedor escolar, de 96 euros al mes, por lo que las familias beneficiaras deberán aportar seis euros mensuales.


“No es una cantidad elevada, pero hay muchos hogares en una situación totalmente desesperada”, advierten desde Fapar. De hecho, desde esta federación calculan, basándose en los datos publicados por Educación, que más de la mitad de las familias de los beneficiarios de las becas ganan menos de 1.000 euros al año, mientras que hasta un millar de estos hogares no cuentan con ningún tipo de ingreso.


¿Qué debo hacer si tengo beca?

Las ayudas para libros de texto llegarán a 12.445 familias, de las que 9.526 recibirán la cuantía total de la ayuda y 2.919 solo la mitad. Las becas ascienden a 160 euros para alumnos de Primaria, 230 euros para Secundaria y 100 para Educación Especial.


A partir del próximo martes, las familias que han obtenido ayuda para la compra del material curricular podrán recoger la 'tarjeta-cheque' en su centro educativo, en la que constará el nombre del alumno beneficiario, el importe de la ayuda y el listado de libros establecido por el colegio.


En el caso de las becas de comedor, los alumnos beneficiarios deberán inscribirse en el servicio de comedor de su centro y Educación pagará el importe de la ayuda al colegio.