PP y PSOE apelan a un proyecto de "consenso" para La Romareda tras el desbloqueo del TSJA

Primer pleno de mociones de la era Chueca. Y el último antes de las vacaciones de verano. E igual que empezó el mandato de Jorge Azcón comienza el de la nueva alcaldesa, con la operación Romareda en el candelero. Apenas dos días después de que el Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) avalara continuar con su tramitación, los grupos municipales han apelado en la sesión de este jueves a un proyecto de "consenso" para el futuro estadio. Todos salvo ZEC han mostrado su apoyo a la candidatura de la ciudad para ser una de las sedes del Mundial en 2030 y la regidora ha llamado a "pasar página" para conseguirlo. Pero ese clima de entendimiento no ha impedido que el habitual cruce reproches entre PP y PSOE se produzca. 

Los concejales han debatido primero una moción que presentaron los conservadores tras conocerse el acta que aceptaba las medidas cautelares solicitadas por el Ayuntamiento de Zaragoza a la resolución del Tribunal Administrativo de Contratos Públicos de Aragón (Tacpa) que, a partir de un recurso de Podemos, paralizó el proceso de licitación. El concejal de Urbanismo, Víctor Serrano, ha asegurado que su intención es inaugurar, a partir de ahora, "una nueva etapa". Para ello ha dicho tener "la mano tendida", aunque sin dejar de cargar contra los socialistas por, según ha manifestado, la "instrumentalización" que han hecho de las instituciones en lo que respecta a La Romareda, en una clara referencia al Gobierno de Aragón. 

Ha intercambiado críticas con la portavoz socialista, Lola Ranera, a quien ha acusado de no ser "capaz de disociar el palo de la rueda". "Le va a costar mucho girar con lo que ha sido su papel estos cuatro años", ha opinado el edil. No obstante, la concejala ha vuelto a enarbolar le defensa del PSOE a construir el estadio -"siempre lo ha querido", ha dicho-, aunque ha reiterado que ellos en su caso habrían apostado por un proyecto "público". 

Fotos del primer pleno de mociones del Ayuntamiento de Zaragoza

Devolviendo las críticas ha apuntado que fue el PP quien utilizó el proyecto como "arma electoral" y que son los socialistas quienes están "tendiendo puentes" frente a un gobierno que lo que pretende es "dinamitar". Y, a la espera de la sentencia definitiva del TSJA, ha cuestionado que la situación de "inseguridad jurídica" en la que, a su entender, está envuelta ahora la operación acabe por "desincentivar" de presentarse al concurso a los posibles licitadores, en principio y si no hay sorpresas, el Real Zaragoza. 

En la comparecencia con la que ha cerrado el pleno, la alcaldesa, Natalia Chueca, ha querido desmentir este extremo y lanzar un mensaje de tranquilidad. Para la regidora, el nuevo escenario político -con el PP en la plaza del Pilar y el Pignatelli, a la espera de la investidura de Azcón como presidente de la DGA- "va a generar menos incertidumbre y más seguridad" al club. Sobre todo, una vez aceptadas las medidas cautelares, en un auto que "deja claro que se ha hecho un buen trabajo" y que despeja "las dudas sobre la legalidad del proyecto". Y que además, ha lamentado, "ha dañado el prestigio del Tacpa". 

No obstante, ahora la operación Romareda atraviesa para la alcaldesa una situación "mucho más favorable". "Es el momento de pasar página y a pesar de las actuaciones del pasado que se sumen al proyecto", ha instado al grupo socialista, aunque sea "después de las elecciones", ha añadido sin dejar aparcadas las críticas. 

El grupo municipal de Vox ha reiterado su apoyo al proyecto porque, ha aplaudido su portavoz, Julio Calvo, "no va a costar un euro a los zaragozanos", así como por el impacto económico positivo que tendría convertirse en sede del Mundial. 

Mientras, desde ZEC han continuado apostando por reformar el campo de fútbol en lugar de construir uno nuevo y su portavoz, Elena Tomás, ha criticado que el "capricho" del gobierno tendrá un "enorme coste" por lo que supondrá la cesión "de miles de metros cuadrados públicos para su explotación privada".