teruel

El antiguo cuartel del Ejército en Caudé, reducido a escombros para ampliar el aeropuerto de Teruel

La instalación castrense fue el lugar en el que decenas de jóvenes turolenses hicieron el Servicio Militar

Una máquina excavadora ultima la retirada de los escombros del antiguo cuartel del Ejército del Aire.
Una máquina excavadora ultima la retirada de los escombros del antiguo cuartel del Ejército del Aire.
Heraldo

El antiguo cuartel del Ejército del Aire de Caudé es ya historia. Las instalaciones militares en las que decenas de turolenses hicieron la mili entre los años cincuenta del siglo XX y 2001 han quedado reducidas a cascotes dentro de una operación de demolición y desescombro para destinar el solar a una nave promovida por el aeropuerto de Teruel que pretende explotar una empresa de drones que vuelan en la estratosfera.

La base militar, cercana al barrio rural de Caudé, contaba con una dotación de 24 soldados, la mayoría de ellos turolenses que aprovechaban esta instalación para hacer el servicio militar cerca de casa, aunque también había valencianos y reclutas llegados de otras comunidades mas alejadas. La principal ocupación de este destacamento, vinculado a un campo de tiro aéreo, era reponer las dianas utilizadas para las prácticas de disparo de los aviones militares y vigilar la caída de las bombas de fogueo lanzadas por las aeronaves.

La demolición permitirá construir una nave de 1.500 metros cuadrados que tendrá acceso directo desde la carretera A-1512. Las obras fueron adjudicadas a la unión temporal de empresas formada por Emipesa y Urbialba por 1,3 millones de euros. La compañía Elson Space ha manifestado su voluntad de arrendar estas instalaciones para el montaje y control de drones estratosféricos.

El derribo del antiguo cuartel ha supuesto la desaparición de un establecimiento que marcó una etapa crucial en la vida de muchos turolenses. Fernando Remón, vecino de Caudé, fue uno de los jóvenes de Teruel que hicieron el servicio militar en esta instalación del Ejército del Aire. Admite que, "a estas alturas" y tras décadas de abandono, el destino del viejo cuartel estaba cantado.

"Todo estaba abandonado y destrozado. Todos los que hicimos la mili allí teníamos asumido que iba a terminar demolido", añade el exsoldado, que no puede ocultar un fondo de nostalgia al ver cómo las excavadores han arrasado en menos de dos semanas con garitas, cantina, dormitorios, cocheras, oficinas y otras dependencias militares. "Todos guardamos recuerdos del pasado, por haber estado allí con compañeros", concluye.

"Podría haber tenido otro uso"

Otro antiguo recluta de Caudé, Manuel Gil, critica que unos edificios que conservaron su estructura en buen estado durante más de dos décadas después del cierre hayan terminado convertidos en cascotes. "Los tejados y las estructuras eran buenas y, si se hubieran conservado, se podrían haber mantenido para distintos usos, pero todo se dejó perder y es lamentable cómo ha terminado", se queja Gil.

Pero el pasado del campo de tiro aéreo también está vinculado a los accidentes de aviones que realizaban prácticas, como las tres aeronaves militares que se estrellaron con el balance de seis pilotos y copilotos fallecidos. La actividad del Ejército del Aire provocó también algún incidente fuera del perímetro del polígono, como la caída de casquillos sobre una serrería de Caudé o de bombas de fogueo sobre campos de cultivo.

La falta de vigilancia y el olvido habían propiciado la rápida degradación de las instalaciones. Los ladrones expoliaron algunos elementos de valor de la antigua base militar –empezando por el hilo de cobre– y el vandalismo destruyó los edificios. Las pintadas proliferaron por todos lados y la maleza se había adueñado de los pasillos y las calles. Las máquinas excavadoras completaron la labor destructora en solo dos semanas para generar el solar en el que la actividad industrial del aeropuerto podrá seguir creciendo.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión