teruel

La aparición de grietas provoca un desalojo de 12 horas en una casa cercana al derrumbamiento en Teruel

El edificio, situado también en la calle San Francisco, fue desalojado de madrugada pero la inspección posterior permitió la reocupación al no haber daños estructurales.

Derrumbamiento en Teruel: una vecina muestra la grieta de la escalera tras regresar a casa
Una vecina muestra la grieta de la escalera tras regresar a casa
Javier Escriche

Un fuerte crujido seguido de la aparición de grietas en la escalera del número 56 de la calle San Francisco de Teruel, a menos de cien metros de la finca que se derrumbó el pasado día 13, obligó al rápido desalojo del inmueble en la madrugada de este jueves. El bloque, construido en 2003, consta de 13 pisos, de los que solo dos están vacíos. La veintena de desalojados pasaron el resto de la noche en casas de familiares y en varios hoteles proporcionados por el Ayuntamiento hasta que pudieron volver a sus casas al final de la mañana tras constatarse la seguridad del edificio.

Tras dos rondas de inspección realizadas por técnicos del Ayuntamiento y de la revisión por un técnico contratado por la comunidad de propietarios, se comprobó que el edificio no presenta daños estructurales y quedó desprecintado para que los residentes pudieran regresar. Algunos vecinos manifestaron que, a pesar del permiso para volver a sus casas, preferían dormir fuera por precaución.

Una vecina de la primera planta del edificio que estaba viendo la tele escuchó "un fuerte crujido" en torno a la una de la madrugada. Al salir a la escalera para comprobar qué había pasado, vio la grieta y dio la voz de alarma. Los vecinos llamaron a la Policía Local, que, a los cinco minutos de personarse en el lugar y tras una primera inspección del edificio, ordenó su desalojo por seguridad.

Una residente explicó que varios de los habitantes de la casa no esperaron la orden de desalojo y salieron fuera de la casa en cuanto conocieron la aparición de la fisura en una pared de la escalera. La misma fuente explicó que los policías llamaron "puerta a puerta" a todos los pisos para que sus ocupantes salieran a la calle. En el operativo participaron policías locales, nacionales y bomberos de la DPT.

"En cinco minutos, la casa quedó vacía", afirmó una vecina. La mujer añadió que, aunque los informes técnicos y las garantías de solidez dadas por el constructor transmiten "tranquilidad", la aparición de las grietas pocos días después del derrumbamiento de la finca cercana -afortunadamente sin daños personales- genera "incertidumbre" entre los vecinos del número 56. "Ni yo ni mi familia dormiremos en la casa esta noche y creo que tampoco lo harán la mayoría de los habitantes de esta casa", concluyó una desalojada.

Entre los vecinos que sí regresaron, figuró la zaragozana Ana Lapuente, aunque solo lo hizo para recoger su ropa y sus enseres antes de marcharse a vivir con unos amigos. Explicó que vive en el número 56 como inquilina y va a perdonar la última semana de alquiler pagado a cambio de la tranquilidad de su familia, que le pidió que no se quedara en la casa más tiempo. Tras volver a su piso, pudo comprobar que todo "estaba bien".

Edificio afectado por las grietas en Teruel
Edificio afectado por las grietas en Teruel
HA

Relató que fue la última vecina en desalojar el inmueble porque, cuando saltó la alarma, "estaba dormida". Las llamadas de la Policía Local a la puerta de su piso la despertaron con la orden de desalojo inmediato. Lapuente señaló que la residente que detectó la grieta "se alarmó" al recordar lo ocurrido el pasado día 13 a pocos pasos de allí y pensó "que también se caía la casa". Evacuaron la finca por la puerta trasera, a la Cuesta de la Andaquilla, y se inició la inspección técnica del edificio. Cada vecino pudo regresar momentáneamente a su casa acompañado de un policía para recoger ropa y lo más necesario para irse a dormir a un hotel.

Un estudio con georradar

El concejal delegado de Urbanismo, Juan Carlos Cruzado, que se desplazó hasta la finca desalojada, explicó que ante la reiteración de las quejas vecinas en la calle San Francisco por las filtraciones y el temor a que provoquen daños en los inmuebles, el Ayuntamiento ha contactado con una empresa para que haga un estudio mediante georradar de toda la calle para detectar la posible presencia de oquedades que podrían amenazar la estabilidad de los edificios. Cruzado consideró poco probable esta amenaza porque no han aparecido grietas en el pavimento de toda la calzada. Apuntó a que la persistencia de filtraciones en la calle podría responder a que la conducción conjunta de aguas residuales y pluviales se desborda con las lluvias copiosas.

Un plan de regeneración urbana

Tras la alarma social generada por el hundimiento del pasado día 13 y ante las persistentes filtraciones en las plantas bajas de las fincas de la calle San Francisco, la Asociación de Vecinos del Barrio del Carmen reclama la ejecución de "un plan integral" de saneamiento en la vía que registró el hundimiento y en sus alrededores.

La asociación vecinal ha convocado una asamblea el próximo día 4 para crear un grupo de trabajo encargado de sacar adelante un plan que dé respuesta a la crisis generada por el colapso del número 21. Según los vecinos, la intervención deberá empezar por las fincas "directamente" afecadas por el derrumbe -los números 19, 21 y 23-25- para extenderse a todo el entorno.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión