Emma Buj, reelegida alcaldesa de Teruel en un pleno marcado por el derrumbe

Fue un acto triste y deslucido, con la pitada de los afectados como sonido de fondo. En su discurso, la regidora aseguró que estará con las víctimas hasta que rehagan sus vidas.

Proclamación de Emma Buj como alcaldesa de Teruel.
Proclamación de Emma Buj como alcaldesa de Teruel.
Antonio García/Bykofoto

Emma Buj, del Partido Popular, fue reelegida este sábado alcaldesa de Teruel por mayoría absoluta con los únicos votos de su grupo, que sumaron 11 de los 21 concejales del pleno. Las otras tres formaciones políticas con representación en el gobierno municipal apoyaron a sus respectivas cabezas de lista, de manera que Enrique Marín (Teruel Existe) obtuvo cinco votos, José Antonio Guillén (PSOE), tres y Alejandro Nolasco (Vox), dos.

Tras el pleno de investidura, Buj encara su tercera legislatura consecutiva, si bien en la primera solo estuvo de febrero de 2016 a junio de 2019, pues asumió el mandato al dejar el sillón municipal Manuel Blasco, para irse al Congreso ocho meses después de haber sido elegido alcalde. En su discurso, la regidora se emocionó al dirigirse a su familia y recordó el tiempo restado a sus hijos durante su infancia y adolescencia, a su esposo, "que aguanta carros y carretas", y a sus padres, a quienes no puede "cuidar en su vejez".

Fue un pleno deslucido y triste tras el hundimiento el pasado martes de un bloque de pisos en la calle San Francisco que dejó sin hogar a 23 familias. Los pitidos, silbidos, ruido de tambores y gritos de "¡fuera!" que los afectados lanzaban desde la calle no dejaron de oírse y todos los portavoces de los grupos municipales hicieron referencia a la tragedia.

De hecho, el primer mensaje de Emma Buj al estrenar legislatura fue para ellos. "Desde el día 13 no puedo pensar en otra cosa que el derrumbe. He acompañado a las familias desde el minuto uno y ya tenemos organizado el plan de realojo", subrayó. Aseguró que "toda esta vorágine pasará y las víctimas dejarán de ser foco mediático, pero yo estaré allí hasta que rehagan sus vidas".

En el terreno político, la alcaldesa prometió dar a la ciudad "el 120%» de sí misma. Dijo que el reto del PP es que, al final de la legislatura, la ciudad sea mejor y sus vecinos hayan percibido «empatía y cariño, pero también gestión". "Teruel crecerá en instalaciones deportivas, movilidad urbana, servicios públicos, empleo y universidad y aprobaremos el Plan General de Ordenación Urbana", destacó.

Tiende la mano a los partidos

Buj tendió la mano al resto de los partidos. Consideró que con Teruel Existe -segunda fuerza política- le unen más puntos que les separan. No fue tan amable con el PSOE, a quien le espetó que los españoles y los turolenses "están cansados de la crispación y los ataques permanentes entre políticos". Destacó que hay cosas que distancian a Vox del PP, pero admitió que también existen coincidencias con el partido de extrema derecha y mostró su confianza en alcanzar juntos consensos positivos para la ciudad.

El portavoz de Vox, Alejandro Nolasco, prometió ejercer una "oposición constructiva" y valoró que, pese a la grave crisis social que ha provocado el derrumbe de la calle San Francisco, todos los partidos hayan logrado "unirse para buscar soluciones".

José Antonio Guillén, líder del grupo socialista tras la renuncia de Rosa López por la debacle electoral, apeló a que la Corporación ayude a los afectados por el derrumbe "a recomponer sus vidas" y pidió que se averigüen las causas de lo ocurrido para que no vuelva a suceder un hecho similar. Enrique Marín, de Teruel Existe, recogió el guante lanzado por la alcaldesa y afirmó que su grupo apoyará todos los proyectos útiles para la ciudad "con independencia del grupo que los presente".

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