Los okupas desalojados de dos edificios de Huesca, detenidos por entrar en otros inmuebles
Uno de ellos fue captado por las cámaras instaladas en un edificio en obras.
La Policía Nacional ha detenido en Huesca a dos okupas que después de ser desalojados de sendos inmuebles buscaban otros edificios donde residir. El arresto, realizado esta semana, ha coincidido con el derribo de un edificio de viviendas en el número 6 de la plaza de San Voto, donde residía uno de ellos.
Según ha informado la comisaría de Huesca, la acción policial ha evitado la usurpación de dos inmuebles deshabitados. Las detenciones se realizaron el pasado lunes y el martes. En el primer caso, la Policía Nacional tuvo conocimiento del acceso de una persona a una vivienda, donde había fracturado los elementos de acceso y sustraído del interior diversos elementos decorativos. Los agentes accedieron a la casa y detuvieron al ocupante, quien reconoció que al saber que la casa estaba deshabitada había decidido revisarla para alojarse con su familia.
En otro caso las cámaras de seguridad instaladas en el interior de una vivienda en obras permitieron que la central de alarmas diera aviso a la Policía, procediéndose de forma inmediata a la detención de un hombre.
Los okupas detenidos habían estado alojados hasta hace unos días en el número 6 de la plaza de San Voto y en un edificio de la calle San Orencio. El primer inmueble está siendo reduciendo a escombros. Después de meses de quejas vecinales, un incendio intencionado ocurrido el 1 de octubre por la quema de unos colchones precipitó la demolición, iniciada el pasado lunes tras una inspección de la Policía para comprobar que no había nadie dentro.
En la calle San Orencio, en el conocido como edificio Wilson (números 14 y 16), también fue desalojada una familia hace unos días, momentos antes de que un arquitecto municipal y otro externo revisaran el estado de la casa con apoyo de agentes de la comisaría de Huesca.
El Ayuntamiento contaba con una orden judicial para entrar en el inmueble con objeto de realizar un informe técnico sobre el estado de la estructura antes de proceder a la ejecución subsidiaria de obras de consolidación. Según fuentes municipales, no se advirtió un riesgo inmediato de colapso, aunque sí problemas en algunos elementos internos, como escaleras o forjados, sobre los que será necesario actuar.
