Azcón apela al consenso con La Romareda en un clima de fuerte tensión entre PP y PSOE
Tras lograr España ser sede del Mundial, Azcón dice que la DGA se va a "involucrar" con el estadio. La izquierda le recuerda su “fracaso” con el estadio.
Tras años de bronca y disputas por la nueva Romareda, el presidente de Aragón, Jorge Azcón, ha apelado este jueves en el pleno de las Cortes al espíritu de la Expo 2008 para impulsar el proyecto de estadio. En su opinión, la designación de España, Portugal y Marruecos como países organizadores del Mundial 2030 “ha cambiado el debate” y obliga a los partidos y las instituciones a llegar a un acuerdo para que Zaragoza sea una de las sedes. Pero las palabras desde la tribuna se han topado con los hechos: el consenso político todavía está lejos y el PP y el PSOE lo evidenciaron.
Pero el debate no ha sido una balsa de aceite .Aunque ha hecho un llamamiento al acuerdo, Azcón ha atacado en su primera intervención a la izquierda, especialmente al PSOE y a Podemos, a la que ha responsabilizado de que quedara desierto el concurso público convocado por el Ayuntamiento para la construcción y explotación del estadio. "El PSOE ofreció la munición y Podemos disparó", ha dicho. Esta acusación enfureció a los socialistas. No solo lo han desmentido, sino que lo han considerado un "insulto".
En su opinión, el recurso presentado por Podemos ante el Tribunal Administrativo de Contratos Públicos de Aragón (Tacpa) ha sido determinante para ese fiasco, por generar “una inseguridad jurídica” que ha frustrado la negociación que había puesto en marcha el Real Zaragoza para obtener la financiación. Aunque la resolución fue revocada por los tribunales, "el daño ya estaba hecho", ha considerado Azcón.
Pero la izquierda también ha sido crítica. En un discurso muy duro, la portavoz socialista Mayte Pérez ha reprochado a Azcón que haya acudido a las Cortes “para hablar de su principal fracaso” como alcalde de Zaragoza. “Está deslegitimado para liderar la solución con la Romareda, está deslegitimado para buscar el consenso porque lo ha dinamitado”, ha declarado.
El enfrentamiento se ha producido en un contexto de tensión, en el que el PSOE ha puesto el pie en el acelerador: en el Ayuntamiento, Lola Ranera pedía la dimisión del concejal de Urbanismo, Víctor Serrano, y una comisión de investigación sobre La Romareda. Los populares protestaban por la actitud de la Diputación Provincial, que ha postergado la reunión prevista esta semana con la alcaldesa Chueca.
El presidente, que ha repasado los antecedentes de este proyecto, ha dicho que la nueva Romareda “beneficia a todos los aragoneses” y se ha comprometido a buscar el consenso. De hecho, el PP presentará una proposición no de ley para su debate en el pleno con con el objetivo de todos los partidos se posicionen sobre el proyecto.
Ha recordado el acuerdo alcanzado en el Ayuntamiento de Zaragoza entre los grupos políticos, del que solo se descolgó ZEC, por el que el gobierno municipal ha abierto una ronda de contactos con las instituciones.
Pero también ha defendido que ese pacto se sustancie en las Cortes. “Es necesario, urgente y beneficioso para todo Aragón. No voy a escatimar esfuerzos”, ha dicho Azcón, que ha recordado que el proyecto que el Real Zaragoza encargó al arquitecto César Azcárate “ha concitado una ilusión desbordante”.
Ha recordado que el proyecto constructivo sigue en marcha y que todos los requisitos exigidos hasta ahora por la Real Federación Española de Fútbol se han cumplido. “Este Gobierno no solo va a sentirse concernido, sino que estará plenamente involucrado”, ha dicho Azcón. Pero al mismo tiempo se ha dirigido al PSOE para que, a través de la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ), “asuma su corresponsabilidad con el resto de administraciones”.
No obstante, no ha aclarado en qué medida va a participar el Gobierno de Aragón en la operación del campo. “Los plazos apremian”, ha advertido Azcón, que ha explicado que en diciembre estará el proyecto básico, para iniciar demoliciones en los edificios anexos a La Romareda en mayo y poder iniciar las obras en julio de 2024.
Mayte Pérez ha recordado que en el acuerdo municipal el PSOE introdujo una enmienda para que en la junta de portavoces se hiciera seguimiento del proyecto, pero que el PP no la ha convocado ni una sola vez en 20 días.
"Traiciona la buena voluntad de los socialistas", ha dicho Pérez, que ha acusado a Azcón de seguir "una estrategia partidista" con el campo. "Su estrategia es excluir al PSOE", ha dicho la líder de la oposición, que ha reclamado transparencia. El portavoz popular, Fernando Ledesma, ha atacado con la cuestión del recurso y ha opinado que la izquierda "tiene obsesión en generar inseguridad jurídica".
Los socios del PP se han posicionado del lado de Azcón. "Estamos donde estamos porque la izquierda ha dinamitado la mejor propuesta de estadio", ha criticado Santiago Morón, de Vox. Alberto Izquierdo, del PAR ha introducido el vector de la deuda histórica del Estado con Aragón, que ha cifrado en 10.411 millones de euros, que en su opinión permitiría financiar la nueva Romareda.
La izquierda ha insistido en el mismo mensaje: "El PP quiere ocultar su fracaso con el estadio". "No va a contar con la unanimidad", ha dicho Álvaro Sanz, que ha considerado que La Romareda no es una prioridad y ha abogado por una reforma. Andoni Corrales, de Podemos, ha dicho que su partido, que promovió el recurso contra el estadio, ya advirtió de los problemas que arrastraba su propuesta.
José Luis Soro, de CHA, reivindicó su papel como defensor de la necesidad de construir un nuevo estadio, pero ha acusado a Azcón de "no tener credibilidad". "Cuatro años después seguimos en la casilla de salida", ha dicho. Menos crítico, Tomas Guitarte, de Teruel Existe, ha apoyado la necesidad de un nuevo campo, pero ha pedido transparencia, "Es una oportunidad que hay que aprovechar.
