El campo advierte que la caza es insuficiente ante la plaga de conejos y exige el uso de biocidas
El sector agrario suma fuerzas para reclamar medidas que pongan fin a los millonarios daños que causan estos animales.
Después de más de una década soportando la presencia cada vez más dañina de la superpoblación de conejos en los cultivos aragoneses, el sector agrario ha decidido sumar fuerzas y exigir todos a una medidas contundentes que pongan fin a la plaga y compensen las pérdidas en las explotaciones.
Así lo han plasmado en un documento firmado ayer por representantes de la Plataforma aragonesa independiente en defensa de la agricultura sostenible (Paidas), de Cooperativas Agroalimentarias y de las cuatro organizaciones agrarias -UAGA, Asaja, Araga y UPA- en el que manifiestan que "agotados, con un sentimiento de impotencia y de rabia constante y viendo desaparecer el futuro del sector" no les ha quedado otro remedio que "denunciar la insostenible situación" que están sufriendo las explotaciones de más de un centenar de municipios aragoneses.
"El problema es cada vez mayor y para solucionarlo no es suficiente la caza", señaló el secretario de Paidas, Raúl Lorente, que insistió en la necesidad de adoptar de "forma inmediata" medidas más eficaces. Entre ellas, el documento suscrito por los representantes del sector, destaca la utilización de biocidas autorizados.
Insisten en que estos han de aplicarse por parte de las administraciones competentes en las infraestructuras públicas (carreteras, autovías, vías de tren, barrancas, balsas de riego...), pero exigen también que se permita su aplicación a los agricultores a lo que se debe facilitar la formación necesaria para su uso, pero también "subvencionar el coste de los mismos". Reclaman también que se "promueva a la mayor brevedad" la utilización de otros biocidas como el fosfuro de zinc o el monóxido de carbono.
Los firmantes del documento defienden la necesidad de establecer una dotación presupuestaria que permita compensar económicamente el total de las pérdidas ocasionadas por la fauna cinegética. "Si las miles de hectáreas afectadas en Aragón y los millones de euros en pérdidas los hubiera provocado una tormenta de granizo, automáticamente la zona afectada sería declarada zona catastrófica", insistió el representante de Paidas para explicar otra de las demandas del sector, que exige que se declare la superpoblación como "plaga" y se catalogue el conejo como "especie productora de grandes daños agrícolas".
Revisar la ley de caza
Los agricultores también solicitan exenciones fiscales y de la Seguridad Social mientras persista el problema con la magnitud actual, que la administración limpie las infraestructuras públicas donde no se permite la caza, como carreteras o vías de tren. Quieren además que se revise la ley de caza y otras normativas vinculadas para incluir las batidas nocturnas desde los vehículos, el uso de carabinas de aire comprimido así como de silenciadores, visores térmicos y visores nocturnos colocados en las armas para garantizar una mayor seguridad y efectividad para controlar la población de conejos.
"No se han hecho las cosas como se tenían que haber hecho en los últimos años", advirtió el secretario general de UPA Aragón, que estima que los daños causados por esta especie en el territorio "pueden superar los 50 o 60 millones de euros.
El representante de UAGA, Javier Fatás, recordó que precisamente por estas mismas fechas, el pasado año la organización agraria ya organizó una concentración frente a la consejería de Agricultura para reclamar soluciones ante los millonarios daños que están causando estos animales especialmente en el cereal pero también en los leñosos.
El secretario general de Asaja en Aragón, Ángel Samper, advirtió que este no es un problema que afecta solo al sector, sino también al consumidor, porque el descenso de oferta se convierte en precios más elevados. Por todo ello y con un documento que llegará a la administración, Federico Lorente, de Araga, confía en que a partir de ahora, "se escuche al sector".
