Luces y sombras de tres años de inversiones para extender la banda ancha en Aragón

Al acabar el año el plan ConectAragón habrá costado 36 millones de euros para asegurar velocidades de 30 megas. El Gobierno central promete ahora llevar 300 megas a todo Aragón por mucho menos.

Alberto Sancho, con su portátil, en la plaza de la iglesia de Castejón de Valdejasa.
Castejón de Valdejasa es uno de los núcleos incluidos en el ConectAragón.
Noeli Barceló

Han pasado casi tres años desde que empezó a materializarse el plan autonómico de banda ancha ConectAragón. En el segundo trimestre de 2015 empezaron a instalarse en los primeros pueblos los sistemas que permitirían a sus vecinos 'subirse' a la alta velocidad y ahora, que está a punto de finalizar, sus beneficiarios destacan las luces y sombras de un plan que no ha llegado ni mucho menos por igual a todas las localidades.

El objetivo del ConectAragón era asegurar que el 98% de la población aragonesa tuviese acceso a internet a unas velocidad mínima de 30 megas antes de finalizar el 2018. Ya se encuentra al 95% de su ejecución y, una vez terminado, habrá supuesto una inversión de 36 millones de euros y llegado a 348 localidades y 351 centros educativos.

Sin embargo, ni los alcaldes ni los vecinos están satisfechos por igual. Mientras en la localidad oscense de Belver de Cinca celebran que este plan ha supuesto "un antes y un después", desde el municipio turolense de Aliaga critican el "engaño" del que ha sido víctima el pueblo.

El plan de la DGA -impulsado por el anterior gobierno PP-PAR- prometía velocidades de al menos 30 megas, pero no se comprometía con ninguna tecnología. Por eso, mientras en algunos pueblos ha supuesto el desembarco de la fibra óptica, en otros se han instalado sistemas mucho más limitados que, además, obligan a importantes desembolsos mensuales a los vecinos que quieren disfrutarlos.

Así, mientras José Foj navega desde su casa en Belver de Cinca a 300 megas "y sin ningún problema", Sergio Uche explica que en Aliaga no llegan a las casas más de 30 megas: "No considero justo que en Teruel capital 300 megas valgan 50 euros y aquí 30 valgan 98 euros al mes. Desde mi punto de vista no merece la pena y nos han hecho quedar fatal a todos los que creíamos que este plan supondría un antes y un después. Está claro que en el medio rural no hay igualdad de oportunidades", critica el alcalde de Aliaga. Por eso, Uche se muestra algo escéptico respecto al gran plan de fibra óptica que presentó Mariano Rajoy esta semana durante un acto en Teruel: "¿De verdad van a meter los cables de fibra óptica por todos los pueblos? Pues ojalá, pero a ver..."

Donde sí se muestran algo más satisfechos es en la localidad oscense de Labuerda. Allí tampoco ha llegado la fibra óptica a las casas pero su alcalde, Enrique Campo, destaca "el cambio fundamental" que ha supuesto el desarrollo del ConectAragón. Si hace tres años denunciaba que no llegaba "ni medio mega" a los hogares, ahora dice que se terminó de instalar el ADSL hace algo menos de un año y que, aunque "en realidad a las casas llegan unos 16 megas" la diferencia es "abismal".

"Antes no podíamos hacer nada y ahora incluso podemos tener wifi en los domicilios y conectar varios portátiles y teléfonos móviles. Eso antes era impensable, te quedabas colgado cada dos por tres, las webs de los establecimientos turísticos se colapsaban... Ahora, en comparación, funciona todo bastante bien".

Fibra para todos

Este mismo viernes el Consejo de Ministros autorizó el primer paquete de ayudas para proyectos de extensión de la banda ancha de última generación (fibra óptica y velocidades superiores a los 300 megas) por un importe de 150 millones de euros. Estas ayudas constituyen la primera convocatoria del Plan 300x100 que se presentó en Teruel y que ha hecho que queden en el aire los que estaban impulsando a su vez las diputaciones provinciales para llegar a aquellos núcleos de población y polígonos a los que no había alcanzado el Conecta.

La Diputación de Teruel ya ha anunciado que suspendía la licitación que tenía prevista para este mes al entender que su proyecto queda superado por el del Gobierno central. De modo que ahora habrá que ver si el 300x100 permite de verdad llevar la fibra óptica a todo el territorio (aunque el presupuesto parece limitado) y acabar así con las grandes diferencias que persisten en el medio rural aragonés. No hay que olvidar que mientras en algunos puntos se disfruta ya de la fibra óptica, quedan muchos núcleos en los que se mueven a velocidades de entre 0,4 y 15 megas, tal y como se refleja en el informe que está preparando la comarca de la Comunidad de Teruel.

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