verano
Tarragona romana en familia
Esta ciudad catalana es un enclave ideal para hacer una escapada en familia. Su patrimonio histórico despierta la curiosidad de los más pequeños.
Tarragona ha sido declarada por la UNESCO como ciudad patrimonio de la humanidad. A tan solo 20 minutos de Salou y Cambrils, es una de las visitas obligadas para realizar con la familia aprendiendo y descubriendo la historia de esta ciudad romana.
El día puede comenzar en el Centro Cultural el Pallol (plaza del Pallol 3) para observar de cerca la Gran Maqueta que ayuda a entender cómo era la ciudad romana. Si se viaja en coche, el párking Saavedra (calle Josepa Massanes, 4) puede ser la mejor opción ya que tiene más de 400 plazas, es amplio y está justo al lado del inicio del recorrido.
La maqueta muestra la ciudad en el siglo II d.C., en el momento de su máxima expansión y apogeo. Fue realizada a escala 1: 500 y tiene unas dimensiones de 18 m3, es la segunda maqueta del mundo romano más grande de Europa, sólo superada por la de Roma. La entrada es gratuita.
Ahora ya situados en lo que debió ser el esplendor de la ciudad del S.II, se inicia un bonito paseo peatonal ajardinado paralelo a la muralla romana. Son 1.100 metros (llegó a tener 3.500 metros) de una muralla de gran altura (tiene unos 12 metros de alto de media) y un ancho que oscila entre 4 y 6 metros.
Además de resultar un agradable recorrido para empezar la jornada, se puede distinguir la torre del Arzobispo o la de Paborde, de base romana y alzado medieval. Tampoco falta una réplica de la famosa estatua de César Augusto o el monumento a Rómulo y Remo.
Los horarios habituales de los recintos de la Tarragona romana son de martes a sábado de 9 a 21 y domingos de 9 a 15. Los lunes solo abre en temporada de verano (22 mayo a 1 septiembre) de 9 a 15.
El precio de la entrada de cada recinto por separado es de 3.30 euros (existe una entrada conjunta del Paseo Arqueológico-Murallas, Pretorio y circo, Anfiteatro y Foro Local por 7,40 euros). Y hay opciones reducidas para grupos, jubilados, pensionistas, discapacitados y estudiantes por 1,70, familias numerosas donde solo paga un miembro y menores de 16 gratis.
Al pie de las murallas y como telón de fondo el Paseo Arqueológico, surge el Campo de Marte, inaugurado en 1871 por el rey Amadeo I de Saboya. Un paseo tranquilo por este parque situado en la avenida Cataluña es uno de los placeres que ofrece la ciudad, donde además se celebran actos culturales y festivos.
Una vez vista la maqueta y la muralla la visita puede continuar por el centro histórico, donde los monumentos romanos se entrelazan con las casas, calles y plazas actuales. En este recorrido por los callejones del casco antiguo sorprende la convivencia de los actuales habitantes de Tarragona con el pasado imperial de la ciudad.
El recorrido conduce hasta la plaza de la Font, uno de los lugares más turísticos de Tarragona, con varios restaurantes y terrazas para tomar un aperitivo, donde se encuentra el Ayuntamiento, el colorista mural de la plaza de los Sedassos, la calle Mayor, con tiendas de souvenirs y productos locales, la calle Cavallers y la del Comte y sus pilones decorados. Un paseo muy agradable para realizar alguna compra y detenerse a comer en alguno de sus restaurantes de cocina moderna o bien de cocina más tradicional.
Dos de los monumentos más representativos del conjunto romano son el Anfiteatro, donde se celebraban las luchas de gladiadores y que se encuentra abierto sobre el Mediterráneo, y el Circo, situado a tan solo unos pasos del Anfiteatro entrando por la Torre del Pretorio. Recorrer un buen tramo del interior de la grada del circo, bajo la ciudad actual, es una experiencia genuinamente tarraconense.
Algunas empresas ofrecen visitas guiadas especialmente pensadas para un público familiar. Iber, por ejemplo, ha diseñado dos actividades didácticas en el Paseo arqueológico, un espacio abierto y sin coches ideal para que los niños corran y, otra, en el circo. Con 'Paseando por Tarraco', Auriga ofrece un itinerario didáctico de unas dos horas de duración que permite conocer los principales elementos de la Tarragona romana. También de la mano de Auriga se pueden descubrir los 'Misterios de la Catedral', un templo repleto de historias y símbolos escondidos. Itinere ofrece asimismo visitas guiadas con material didáctico para los niños y en 3D.
La catedral de Tarragona es siempre visita obligada en cualquiera de las rutas que se elijan por la ciudad. La fachada es simplemente impresionante. Se puede visitar sin guía y tan solo hay que solicitar en la zona de acceso un material didáctico que hará más ameno el circuito a los pequeños.
Justo al lado del circo está la Casa de la Fiesta (Vía Augusta, 4), un espacio donde la ciudad expone los elementos tradicionales que forman el tan querido Séquito festivo. Bestias, gigantes y cabezudos esperan aquí el momento de volver a llevar la celebración a la calle, un momento de alegría compartida en Tarragona.
