aragón es extRAORDINARIO

Mosqueruela tiene las llaves de su futuro

Integrada en la red de Pueblos Mágicos de España, cargada de argumentos para la visita, esta localidad turolense sorprende y cautiva

Tiene Mosqueruela el título de pueblo mágico. No lo otorga Hogwarts, sino una entidad llamada Instituto de Desarrollo Local y Estudios Sociales (IDL)., y hay otras 13 localidades aragonesas en la lista, que rivaliza con la de Pueblos Más Bonitos de España. Matices aparte, esta localidad de la comarca Gúdar-Javalambre tiene poderosos argumentos para que los GPS la señalen. Alba Lucea es su alcaldesa desde hace año y medio; nacida en Barcelona, se casó aquí y aquí ha tenido a sus hijos.

«Tenemos atractivos patrimoniales abundantes, tanto arquitectónicos como naturales. Este pueblo fue un cobijo de trashumantes entre Castellón y Aragón; tiene una calle señorial del lado de la solana, la de los Ricos Hombres, donde vivían antaño las personas más adineradas. Sigue siendo una zona magnífica: casonas de piedra con doble madera ornamental en los aleros, barrocos como el coro de la iglesia, y forja; son laberintos por dentro, se comunican unas con otras, pero al ser privadas, como el palacio del rey Jaime I, no son visitables. El antiguo hospital es otra riqueza que queremos recuperar».

Mosqueruela es un término muy extenso, hay dos habitantes por kilómetro cuadrado con 537 habitantes censados. «Seguimos estando por encima de la media provincial ­–explica Alba– y aunque la despoblación nos afecta, como a todos los pueblos, vamos resistiendo; hay escuela infantil y 45 niños en el colegio, centro de salud, farmacia y varias tiendas».

Patricia Montolío es guía turística; nacida en la localidad, a la que ha regresado tras un periodo formativo en Valencia, recuerda que «Mosqueruela es un ejemplo de trazado ortogonal amurallado. La calle Mayor lo vertebra todo, y el resto de vías son perpendiculares a ella, lo que genera una estructura de cuadrados casi perfectos. Hay muchas canteras en la zona y mucho monte para la madera; de ahí los materiales que presiden las construcciones».

Patricia destaca la majestuosa Casa Fuerte (nada que ver con al del concurso de Mediaset), que data de 1622. «Es un edificio particular que está siendo restaurado como vivienda desde 2007, y ha tenido varias funciones; torreón de vigilancia, cuartel de los altos mandos en las guerras carlistas y escondrijo en las bodegas durante la guerra civil».

Sincronizar las llaves

La iglesia parroquial de la Asunción tiene el Archivo de las Aldeas de Teruel; ahí se halla toda la historia remota de la provincia. Este archivo descansa en el primer nivel de altura de la iglesia y está bunkerizado, como en las películas. Tienen llave el párroco, el juez de paz y la persona que ocupa la alcaldía. "Hay que accionarlas a la vez –explica Alba, poseedora actual de una de las llaves– para abrir la puerta. En este archivo se detalla la constitución de los pueblos y sus delimitaciones territoriales. Se conservan los documentos microfilmados.

Hay más huellas de épocas remotas de esplendor, como los restos del convento Priorato de Santa Ana; queda un muro en pie, y muchas piedras de sus paredes se reutilizaron en construcciones del pueblo. Allí había cerámica decorada de Teruel, ollería vidriada, cantarería... además de todo eso destacaban dos sepulcros, depositados en el Instituto Valencia de Don Juan, de Madrid.

De hermosos y bien regados barrancos a pinares en las alturas

Los alrededores del pueblo también tienen su ‘musiquita’ en la memoria y el aliciente de la aventura en el mapa. Por ejemplo, hubo un campamento maqui entre Mosqueruela y Fortanete; existe un inmenso pinar a 2.000 metros de altura al que se llama Pinar Ciego porque es llano y muy frondoso. Resulta fácil perderse a idea o sin querer, de hecho, muchos de los que se escondían allá no sabían salir luego.

El barranco de Las Truchas, a nueve kilómetros de las primeras casas del pueblo, es un área recreativa a la que se accede andando o en vehículo por una pista bien pisada; allá nace el río del mismo nombre, con su represa pétrea, pinares muy bonitos a la vera y zonas de recreo y merienda. Es la escapada favorita de los mosqueruelanos; por cierto, chinchirinos es otro gentilicio local aceptado.

Hay que hablar del barrio de la Estrella, empezando por la estatua gigante de la virgen en la carretera, que marca el desvío hacia este paraje; se llega a él tras 12 kilómetros de camino. Solamente viven allá dos personas octogenarias, Martín y Sinforosa, conocidos en toda la comarca. Hace algo más de un año, Land Rover grabó allá su anuncio de Navidad. “En La Estrella –revela Alba– hubo una gran riada que se llevó por delante casi todo el pueblo y a muchos de sus habitantes. Quedan en pie dos casas y el Santuario de la Virgen, que es objeto de una tradición el último domingo de mayo; vamos todos los habitantes de Mosqueruela y se pasa allí la noche en casas de la cofradía o en tiendas de campaña”.

Las pistas de esquí de Valdelinares están a 20 minutos por carretera, un dato fundamental para el turismo; además, la caza de la cabra montesa atrae muchos visitantes, y Mosqueruela tiene coto micológico municipal, algo único en Teruel; hay comarcales en el Maestrazgo y Albarracín.

Los portones de la muralla

La muralla de Mosqueruela tuvo siete puertas de acceso en su día; cinco siguen en pie, y la más conocida es la puerta de san Roque. Inicialmente se trató de un torreón defensivo, y en su primer piso hay una ermita. Con una lápida visible, que perteneció a un delincuente, se hizo en su día una advertencia a que quienes venían con aviesas intenciones, a fin de que se lo pensaran un poco. “Estamos en trámites con el obispado para que la ermita se ceda al ayuntamiento –explica la alcaldesa– y pueda hacerse visitable”. Otra puerta muy singular es la del Pocico, que da a las eras. También destacan el Portal de Teruel, que apunta a la salida hacia la capital de provincia, y el Portal del Postigo, casi escondido y muy próximo a la calle Ricos Hombres; conduce a la salida por la zona de la solana y estaba concebido para que los más pudientes pudieran salir discretamente del pueblo si era menester.

MOSQUERUELA

Comarca. Gúdar-Javalambre.

Cómo llegar. Desde Teruel, su capital de provincia, hay 103 kilómetros por la Autovía Mudéjar y la A-1701.

Pueblo mágico. Mosqueruela está en la red que agrupa a 84 pueblos españoles;hay otros 13 aragoneses.

Dónde dormir y comer. Además de varias casas rurales, se cuenta con La Posada en la plaza o el hotel Montenieve al final de la calle del Horno. En ambos hay servicio de bar y restaurante. Para comer se cuenta con el Existe, La Perdiz en la carretera, el bar de Rafa y La Taberna.

Compras. Hay tres tiendas que incluyen productos de la zona, y dos carnicerías, Laura y Robres.

La bebida típica: el zarzón. Este digestivo se hace con medio vaso de tinto, miel (o jarabe de limón) y bicarbonato.

Historia. El pueblo se fundó en 1265, bajo el reinado de Jaime I. En 1366 obtiene el título de villa y la posibilidad de conservar el archivo histórico de las aldeas. Su escudo tiene como elementos peras, moscas y las franjas que representan a Aragón.

Artículo incluido en la serie 'Aragón es extraordinario'.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión