turismo
Conocer Benasque por tierra, agua y aire
Parapente, hydrospeed, birding, mountain bike y todo lo que puedes hacer en la zona del valle de Benasque, con recomendaciones y precios.
Bien es sabido por la gran mayoría que el valle de Benasque alberga el mayor número de cimas de 3.000 metros de altura del Pirineo aragonés, que se distribuyen en tres grupos en torno a los macizos de Posets, Maladeta y Perdiguero. Esto pone a disposición del viajero una amplia variedad de picos y rutas, así como todo tipo de paisajes y zonas boscosas que se convierten en un auténtico regalo para los sentidos.
Una buena opción de ocio en la zona es la visita al Parque Natural Posest-Maladeta, declarado en el año 1994, en él podemos disfrutar del privilegio de observar algunos de los glaciares que aún perduran en el Pirineo como el mítico glaciar del Aneto -en el macizo de Maladeta- o el glaciar de Llardana -en el de Posets-, así como de sus 95 lagos naturales con múltiples cascadas.
A vista de pájaro
Sin embargo, para aquellos a los que nos les atraiga el plan de la caminata, una buena alternativa para ver las cumbres del parque es subirse al telesilla del Aneto, en Cerler, desde el que se pueden divisar las tres cimas y, por supuesto, la del techo del Pirineo, montaña que da nombre a este remonte: el Aneto. Disponible hasta el 30 de agosto de 10.30 a 17.00, su precio es de 8 euros la entrada infantil y 12.50 euros la de adulto.
Otra buena manera de disfrutar del valle de Benasque desde las alturas es sobrevolarlo en parapente. De hecho, las condiciones climáticas de la zona sumadas a la belleza del paraje transforman el valle de Benasque y, en concreto, la localidad de Castejón de Sos en la ‘Capital del aire’ como la denominan los amantes del vuelo sin motor de todo el mundo. En la zona hay varias empresas dedicadas al vuelo sin motor.
Una de ellas, que cuenta con casi tres décadas de experiencia, es la escuela Tandem Team que iniciaba su temporada el pasado mes de junio con sus vuelos y cursos de parapente en distintos niveles. Una actividad segura y que puede hacer cualquier persona de entre 7 y 80 años, “siempre y cuando su estado de forma lo permita”, explica Joel Martínez, responsable de marketing.
La escuela, dirigida por Basilio Silva, excampeón de España de parapente y una eminencia en este ámbito, realiza más de 1.000 vuelos al año aunque la mayoría se concentran entre los meses de marzo y septiembre. “Somos la única escuela de la zona certificada por la Asociación de Pilotos de Pilotos e Instructores de Parapente (A.P.P.I.)”, asevera Martínez.
En cuanto a los precios de esta actividad, el vuelo más económico, de unos 10 minutos de duración y a una altura de 300 metros tiene un coste de 66 euros. Sin embargo, el producto estrella es el vuelo desde el pico Gallinero, a 1.300 metros de altura y que dura en torno a 40 minutos. “Este cuesta entre 125 y 155 euros y te ofrece una vistas 360 del Pirineo que son completamente únicas.”, advierte el responsable.
Para amantes del agua
El río Ésera, considerado la arteria que vertebra el valle de Benasque, se transforma en el escenario ideal para practicar una amplia gama de deportes acuáticos, aptos tanto para las familias y amantes del relax como para los más intrépidos. Son varias las empresas de la zona que ofrecen actividades acuáticas de todo tipo como Sin Fronteras Adventure, radicada en el municipio de Campo, que propone al visitante actividades como rafting–actividad dirigida a cualquier persona a partir de los 5 años de edad y de tres horas de duración- cuyo precio ronda los 45 euros por persona dependiendo el número de participantes o paddle surf, una actividad que también puede hacerse en familia.
La oferta la completan el hidrospeed –o descenso por aguas bravas-, o los descensos en Kayak o Duckys –una especie de canoa doble hinchable- cuyos precios van entre los 45 y los 80 euros respectivamente. “Las actividades estrella durante estos días son el rafting, los barrancos y los duckys”; explica Sergio Lodigiani, gerente de Sin Fronteras Adventur, fundada en el año 2000. Además, asegura que se trata de actividades dirigidas a toda la familia.
“En el caso del rafting y el barranco hay secciones específicas para poder hacer en familia con niños desde los 5 años. Y el hecho de ser una actividad acuática en verano hace que tenga mucho tirón en esta época del año”, destaca. El valle altoaragonés sorprende también por sus barrancos ya que podemos encontrar hasta 36 descensos entre los que se encuentran algunos de los más míticos del Pirineo como los de Eriste, Barbaruens, Literola o Liri. En el caso de los descensos por barrancos acuáticos existen varios niveles según la experiencia de los participantes y el precio de la actividad oscila entre los 48 y los 78 euros.
Sobre dos ruedas
Otra interesante opción para conocer la zona de una manera diferente, en este caso sobre dos ruedas, es la que ofrece al visitante Ride the Pyrenees que propone al viajero conocer uno de los rincones más bonitos del Pirineo sobre una mountain bike. Con actividades dirigidas a todos los públicos incluyen desde salidas familiares y excursiones para todos los públicos a rutas de enduro para los bikers más atrevidos. Además, cuentan con servicio de alquiler, reparación, guías, escuela de perfeccionamiento y un amplio etcétera.
“La actividad que goza de mayor demanda en estos momentos es el enduro para el que debe tenerse un poco más de técnica. Además, este valle está considerado como uno de los espacios con mejores senderos del sur de Europa”, asegura Sergi Imbernón, gerente de Ride the Pyrenees que recuerda que la ruta integral del Gallinero, en Castejón de Sos, es una de las más famosas del mundo. En cuanto al precio de alquiler de una de estas bicis puede ir desde los 18 hasta los 55 euros dependiendo del servicio.
Turismo responsable y sostenible
Además, en el valle de Benasque podemos encontrar iniciativas de ecoturismo como las de piriNATURE, que ofrece actividades de montaña y naturaleza responsables con el medio ambiente. “Dentro de nuestro catálogo de actividades destacan aquellas sobre turismo ornitológico –también denominado ‘Birding’- con experiencias diseñadas tanto para especialistas como para aquellos que quieren iniciarse en este mundillo desde cero”, explica Helena Parga, responsable de PiriNATURE y guía de media montaña.
PiriNATURE, certificada por Ecotur España, ofrece una amplia variedad de actividades de montaña sostenibles y un porcentaje del precio de la actividad se destina a proyectos de conservación en los que colabora activamente, en concreto el estudio de un glaciar rocoso ubicado en la zona: "El valle de Benasque es uno de los territorios del Pirineo aragonés con mayor número de Ibones, lagos de montaña de origen glaciar, considerados centinelas de cambio global".
Actualmente junto a Ride the Pyrennes trabajan en la creación de rutas de ‘Birding’ en bicicleta eléctrica. “Una manera diferente y muy original de conocer el entorno natural de forma más divertida”, advierte Parga. El precio de la actividad ronda los 40 euros por persona e incluye el alquiler de la bici eléctrica, el acompañamiento de un guía experto en birding y un ‘lunch’ de productos locales.
