Tres muertos en dos accidentes en apenas una hora en Aragón

Tres personas fallecieron ayer en dos accidentes de tráfico ocurridos con una diferencia de poco más de una hora en la N-211 en Mequinenza y en la N-II en Peñalba. En este último punto, tuvo lugar el siniestro más funesto, en el que dos de los tres ocupantes de un mismo turismo perdieron la vida. El tercero resultó herido grave.

En el primer accidente, del que se dio aviso a las 15.20, resultó fallecido un camionero, identificado como J. J. F. S, de 66 años de edad y vecino de Lérida. Por causas que se desconocen, el vehículo se salió de la vía a la entrada de una curva cuando bajaba el puerto que existe a la llegada a Mequinenza. La cabina del camión cisterna, que transportaba orujo de oliva, se empotró entre la cuneta y un talud y los servicios de emergencia tuvieron que rescatar a la víctima del interior.

El siniestro se produjo en el kilómetro 310,900 de la N-211. Hasta allí, entre otros, se desplazaron los bomberos de la Diputación de Zaragoza con sede en Caspe, un coche de mando de Tarazona y efectivos del parque comarcal del Bajo Cinca. Precisamente, cuando se encontraban atendiendo este aviso, estos últimos fueron alertados del segundo accidente mortal, que se produjo sobre las 16.40 en el kilómetro 397 de la N-II, muy cerca de Peñalba.

En este caso, por causas que se desconocen, el único vehículo implicado, que viajaba en dirección Barcelona, se salió por el margen derecho de la vía y tras dar varias vueltas de campana, quedó volcado en un desagüe de riego, que presenta una profundidad de cinco metros, según indicó el responsable del parque comarcal del Bajo Cinca, Carlos Badía.

A consecuencia del fuerte impacto, dos de los ocupantes, un hombre y una mujer, vecinos de San Vicent dels Horts (Barcelona) e identificados como J. F. G., de 82 años, y T. T. L., de 78, fallecieron y el conductor del turismo, J. A. R. T., de 52 años, resultó herido grave. Tras ser rescatado del interior del vehículo, el hombre fue trasladado en ambulancia al hospital Arnau Vilanova de Lérida. Al lugar de los hechos, además de los bomberos, acudieron tres ambulancias así como Guardia Civil de Tráfico.

Según explicó el alcalde del municipio de Peñalba, Carlos Lerín, al coincidir en fin de semana, el tráfico de este tramo sin desdoblar de la N-II era ayer muy inferior al habitual, que suele ser elevado e, incluso, "insoportable" y presentar una alta densidad de camiones.

Al margen de las circunstancias del accidente, el primer edil insistió en la alta siniestralidad de esta vía y de nuevo, urgió una solución. En su opinión, resulta "incomprensible" que la carretera que une Madrid y Barcelona conserve un tramo sin desdoblar. Para Lerín, hay que actuar ya, sin dilatar más las medidas oportunas, "ya que el riesgo es diario para nuestros vecinos, entre ellos, los escolares".