La renta llega a las oficinas de hacienda

La campaña del Impuesto sobre la Renta se estrena mañana en las oficinas de la Agencia Tributaria después de un mes de su puesta en marcha en internet. Los contribuyentes pueden acudir al servicio de confección de declaraciones hasta el día 30 de junio, previa cita. En él se prevé hacer unas 52.000 ‘rentas’ en Aragón.

La puesta en marcha del servicio de cita previa de la Renta marca un nuevo paso en la campaña del impuesto, ya que es uno de los más solicitados por los contribuyentes. El teléfono 901 22 33 44 para pedir día y hora se volvió a colapsar esta semana, tras comenzar a funcionar el miércoles, con la avalancha de llamadas de los contribuyentes que prefieren la atención en las oficinas a internet, aunque el grueso de las declaraciones volverán a presentarse de forma telemática.


Las primeras citas se dieron para mañana y se pueden solicitar hasta el 29 de junio, penúltimo día de campaña. Están obligados a presentar la declaración de la renta unos 687.850 aragoneses, según las estimaciones de la Agencia Tributaria. De cumplirse serían un 0,12% más que el año pasado, lo que supondría el principio de la recuperación de contribuyentes.


Esta semana también, la Agencia Tributaria ha alertado sobre el fraude con la difusión de teléfonos de tarificación adicional que decían dar este servicio de cita previa. Recordó que solo existe un número, el citado 901 22 33 44, y que tiene el coste de una llamada local. Además, este servicio se presta de forma gratuita en www.agenciatributaria.es.


En Aragón, el servicio de cita previa tiene previsto atender a unos 52.000 contribuyentes, cifra similar a la de la campaña pasada.


No todo el mundo puede acudir a este servicio. No se puede utilizar si los rendimientos del trabajo superan los 65.000 euros, los rendimientos del capital mobiliario los 15.000 euros, si se tienen rendimientos de actividades económicas en estimación directa (empresariales, profesionales o en atribución), más de un inmueble arrendado o más de dos transmisiones de bienes o regímenes especiales. Tampoco se confeccionan declaraciones complementarias de años anteriores, recuerdan desde la Agencia Tributaria.


El IBAN y la referencia catastral


Esta pide a quienes acudan a las oficinas que lleven el borrador de la declaración y datos fiscales si los han recibido o descargado de internet, y "otros documentos necesarios para modificar el borrador o que no consten en los datos fiscales", señalan desde Hacienda. En la lista incluye el DNI original del titular que acude a la cita y fotocopia del DNI de todos los que figuren en la declaración, número IBAN (el nuevo número internacional de las cuentas bancarias que facilitará el banco) y las referencias catastrales de todos los inmuebles de su propiedad o en los que viva de alquiler o en otras circunstancias (IBI).


El 75,6% por internet


El grueso de las declaraciones se volverá a presentar por internet, siguiendo los objetivos marcados por la Agencia Tributaria de fomentar la presentación por esta vía. El año pasado, el 75,6% de las declaraciones en Aragón llegaron a través de internet, bien confirmando el borrador o confeccionando la declaración con el programa de ayuda Padre. Este último se ha renovado este año para que resulte más sencillo el volcado de datos y la confección de la declaración, explica Hacienda.


Además, el borrador se puede obtener directamente en la página web de la Agencia a través del programa Reno. El año pasado lo utilizaron más de medio millón de contribuyentes aragoneses. Se necesita introducir el importe que aparecía en la casilla 415 de la declaración del año pasado. Si no la tiene se puede pedir que Hacienda envíe un código a través del sistema Cl@ve PIN (el PIN 24 horas del año pasado).


Los colegios de economistas y titulados mercantiles incluyen entre sus recomendaciones utilizar estas vías para obtener los datos fiscales y, si se cumplen los requisitos, el borrador. "Lo mejor es solicitar estos documentos" en internet, aconsejan, "para no perder tiempo esperando" a que lleguen por correo. A esta primera documentación en la mano suman recopilar los principales documentos que reflejen las operaciones que se hicieron el año pasado y las declaraciones de ejercicios pasados. En el papeleo incluyen la información bancaria, escrituras, contratos de alquiler, facturas, recibos del IBI (contribución), etc.


"Cada vez los bancos dan menos papeles. Si no han recibido la información fiscal deben pedirla", aconseja Iván Pineda, experto fiscal del Colegio de Gestores Administrativos de Aragón. A ello une la necesidad de revisar el borrador, un consejo que repite también la propia Agencia Tributaria.


El plan PIVE tributa


Entre las cuestiones que habrá que añadir si cambiaron el año pasado estarán los datos de ascendientes y descendientes y las cuotas satisfechas a sindicatos y colegios profesionales. Los economistas añaden comprobar que sea correcto el porcentaje de propiedad de los inmuebles y del préstamo por adquisición de vivienda, según la guía de la declaración del Registro de economistas y asesores fiscales (REAF) del Consejo General de Economistas. Recuerdan que tributan las cantidades recibidas como subvenciones para adquirir una vivienda o las ayudas a la compra de vehículos del plan PIVE.


Este año es el último de la última prórroga del Impuesto sobre el Patrimonio. El REAF recuerda que solo se pueden presentar estas declaraciones por internet.


Entre las novedades de este año está el límite para las indemnizaciones por despido, que tributan si superan los 180.000 euros, y la exención de las posibles ganancias que pudo obtener el comprador de una vivienda tras una dación en pago.


También se ha flexibilizado la tributación de las pérdidas de los afectados por las participaciones preferentes. En este ejercicio se permite compensarlas con otras partidas con las que hasta ahora no era posible, como las ganancias patrimoniales obtenidas por transmisiones, como la venta de un piso.


Los expertos aconsejan revisar las deducciones autonómicas. En el caso de Aragón, una de las más aplicadas en este primer mes de renta está siendo la deducción del 10% de las cuantías abonadas en un seguro privado de salud, asegura Pineda. Recuerda que si la póliza incluye salud dental "deberá descontarse la parte proporcional". Si al contribuyente le toca pagar, apunta que una facilidad muy utilizada es el fraccionamiento del pago. "Si se domicilia se paga el 60% el 30 de junio y el resto en noviembre", indica, para hacer más leve el desembolso.