turismo
Seis destinos para teñir Instagram de los colores del otoño
No hace falta salir de Aragón, para disfrutar de un paraíso multicolor en esta época del año.
La primavera llena los campos de flores, el verano los dora y el inverno los cubre con su manto blanco, el otoño hace gala de la amplia paleta de colores de la naturaleza haciendo las hojas quebradizas y peinando las ramas de los árboles con la brisa. Hojas que crujen bajo tus pisadas, olor a madera húmeda, las primeras rachas de aire frío entrando por tu nariz y tú, dentro de tu ropa de abrigo, contemplando un paisaje de cientos de colores de gamas verdes, marrones, rojizas, amarillas... ¿No te apetece una escapada así?
El Pirineo es uno de los enclaves por los que merece la pena perderse durante el otoño. Aunque España tiene cientos de lugares preciosos en esta época del año, no es necesario salir de la región si lo que se desea es disfrutar de un paisaje multicolor de gran belleza:
Integrado en el Parque Natural de los Valles Occidentales de La Jacetania, este enclave natural es una opción perfecta para quienes quieran realizar actividades deportivas como BTT, escalada y parapente, entre otras opciones, o simplemente disfrutar de estar en la naturaleza.
El Parque Nacional de Ordesa y Monteperdido celebraba el pasado 2018 su centenario. Sus raíces, ancladas en la zona pirenaica central de Huesca, levantan un enclave natural catalogado como Patrimonio de la Humanidad para la Unesco.
Otro emplazamiento de Huesca donde disfrutar de todo lo que la naturaleza puede ofrecer. Es un rincón del Parque Nacional de Ordesa que reposa al sur del macizo de Monte Perdido. Su escarpada orografía puede llegar a hacer peligrosa la ruta turística, por lo que es recomendable no acudir en época de lluvias e informarse sobre la climatología que pueda poner en riesgo la excursión.
![ARAGON. ESPECIAL 23 ABRIL. A CANFRANC EN EL CANFRANERO / 29-02-2019 / FOTO: GUILLERMO MESTRE [[[FOTOGRAFOS]]]](https://imagenes.heraldo.es/files/image_640_360/uploads/imagenes/2019/04/22/13-imagen-29032019-n1a9402.jpeg)
Además de disfrutar de la Estación Internacional de Canfranc, lugar que jugó un papel clave como conexión con el resto de Europa y, en especial, durante la Segunda Mundial, el paisaje que la envuelve es digno de contemplar.
En la frontera con Francia, con la que se comunica mediante el paso de Portalet d'Aneu, se encuentra el valle de Tena, uno de los más extensos y poblados del Pirineo. Sus dos grandes embalses, el de Búbal y el de Lanuza, embellecen aún más las vistas desde las alturas de los picos de alrededor.
En la cara oculta del Moncayo y rodeada de montañas se encuentra Calcena, en la provincia de Zaragoza. Una de sus actividades más famosas es la Calcenada, que se celebra en distintas épocas del año, una de ellas en agosto. Es una carrera popular cuyo recorrido rodea el Moncayo y, aunque tiene algunas variantes, el recorrido original consta de 104 kilómetros.
