A finales del siglo XXI y tras realizar un largo viaje espacial de dos años, la tripulación de la nave Prometheus, integrada por científicos y exploradores, alcanza un remoto planeta con el objetivo de encontrar la respuesta definitiva al origen de la vida en la Tierra. Y para lograrlo van armados con toda suerte de equipos, aparatos e instrumentos. Incluido, claro está, el imprescindible lector de carbono. Y es que basta una lectura detallada del mismo para desvelar la respuesta… al gazapo presente en este intercambio de impresiones ente los doctores Shaw y Halloway. La otra opción es leerlo en 'Que la ciencia te acompañe'.

El diálogo

“-¿Tienes el lector de carbono? -inquirió la doctora Shaw al doctor Halloway, a fin de determinar la antigüedad del esqueleto que acababan de encontrar en aquel ignoto planeta y que presumiblemente correspondería a un 'ingeniero', tal como la pareja de científicos se refería a los seres responsables de nuestra aparición sobre la Tierra.

-¿Cuánto lleva muerto?

-Cerca de dos mil años.

Poco después, ya en el interior de la Prometheus, la pareja de doctores se reúnen para celebrar su descubrimiento.

-Hemos encontrado lo que buscábamos. Estuvieron aquí, este… -comenzó la doctora Shaw.

-Este es el descubrimiento más importante de la historia de la humanidad –le interrumpió su colega y pareja-. Sí, lo sé. Es increíble, ya lo creo. Pero… yo quería hablar con ellos. ¿No quieres saber por qué fueron a la Tierra? ¿Por qué nos abandonaron? Quiero respuestas, cielo”.

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'El abuelo que saltó por la ventana y se largó'. Un gazapo que es la bomba