Las claves para sobrevivir a unas vacaciones con niños

No hay nada mejor que unas buenas vacaciones en familia, en las que desconectar del trabajo, pasar tiempo juntos y coleccionar momentos inolvidables. Sin embargo, aunque sea uno de los periodos más esperados del verano, coordinar todo para que salga perfecto es complicado. Nuevos horarios, diferentes rutinas, viajes en coche con los interminables ‘¿cuánto queda?’… el ritmo de estos días de desconexión nos afecta a todos, tanto a los niños como a los adultos, por eso es importante que apuntes estas claves para conseguir unos días para el recuerdo.

Mantén una alimentación saludable

La preocupación por ofrecer una alimentación sana a los niños es cada día más creciente, como reflejan las más de 9 millones de búsquedas anuales en internet en la categoría de alimentación infantil, que ha crecido un 3% con respecto a 2016. La tendencia general sigue siendo la de los platos preparados en casa, en concreto, un 86% de los españoles elabora comidas para sus hijos menores de dos años al menos una vez a la semana. Sin embargo, en los periodos vacacionales esto se complica y se recurre a alimentos preparados. En ocasiones, se piensa que la calidad nutricional de estos productos es peor, pero diversos estudios han desmentido esta creencia popular. “Es preferible optar por un tarrito que nos garantice calidad tanto en los alimentos utilizados como en la preparación de los mismos, a sentir angustia o ansiedad por no llegar a todo", explica Silvia Álava, especialista en Psicología Clínica y de la Salud y en Educativa y Familiar.

No alteres la rutina de higiene

Al estar fuera de casa no se tiene acceso a todos los productos de higiene que normalmente se encuentran en el hogar, por eso, conviene llevar una bolsa equipada con todo lo necesario: pañales, crema, jabones específicos… "Las necesidades de higiene de los niños son las mismas en verano, pese a que estemos de vacaciones y pasemos más horas fuera de casa, por eso es recomendable ser previsores y llevar en el bolso un cargamento de socorridas toallitas, pañales o de ropa de recambio", comenta Álava.

Consigue superar los temidos viajes en coche

No hay cosa que dé más pavor a la hora de plantear un viaje que las horas de desplazamiento en coche. Por ello, según recomienda la psicóloga, se debe explicar a los niños qué es lo que se va a hacer y qué se espera de ellos. Además, es conveniente planificar con antelación la duración, junto a la frecuencia y ubicación de las paradas.

No trastoques sus horarios

Mantener los hábitos que se realizan diariamente es esencial. "Aunque sea verano y los horarios se relajen, hay que tener en cuenta que los niños tienen que seguir llevando una rutina", dice Silvia Álava. "Es cierto que podemos ser más flexibles, pero no conviene alterar los ritmos de sueño y debemos mantener en lo posible los horarios de las comidas", explica la psicóloga. Del mismo modo, es importante seguir marcando normas y límites ajustados a la edad y personalidad del niño. "En vacaciones puede ser de utilidad hacer una reunión con los niños al llegar a nuestro destino, para recordar las normas de casa y especificar que allí también existen", comenta Álava.

Crea el ambiente idóneo para el sueño

Aprender a crear una buena rutina de sueño es muy necesario en todas las edades. Establecer los hábitos nocturnos en los más pequeños es una tarea complicada y que además se puede trastocar en cualquier minuto, sobre todo en época vacacional. Un truco para paliar los cambios en la vigilia es seguir los mismos rituales de todos los días, para autorregular el sueño. Además, otros factores pueden ser bañar al bebé y realizarle un masaje relajante mientras se le perfuma o leerle un cuento antes de que los niños se acuesten. "Estas rutinas antes de irse a dormir disminuyen el nivel de arousal de los bebés, o lo que es lo mismo, la intensidad de su conducta", concluye Silvia Álava.