Salud

Cinco consejos para que la astenia primaveral no acabe contigo

El decaimiento y la fatiga son algunos de los síntomas de este trastorno, que no necesariamente se produce en esta época del año.

El cambio de hora puede afectar a nuestro organismo

Dificultad para conciliar el sueño, irritabilidad, fatiga, cansancio...Estos son algunos síntomas de la astenia, un trastorno leve que la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria define como 'la falta de fuerzas o decaimiento caracterizada por una sensación de cansancio, fatiga física y psíquica, bajo tono vital y apatía.'

Aunque no hay ningún estudio que asocie este trastorno a la llegada de la primavera, el cambio horario o las variaciones de temperatura que se producen en estas fechas pueden afectar a nuestro organismo y provocar alguno de los síntomas mencionados.

Se trata de algo pasajero, que no suele prolongarse más de 10 días, por lo que el mejor remedio para este trastorno es tener un poco de paciencia y seguir algunos unos hábitos saludables como los que se recogen a continuación.

Sin medicaciónLa astenia no es ninguna enfermedad, por lo que no es necesario tomar ningún tipo de antibiótico o medicamento, salvo que sea por prescripción médica.

Plátanos, frutos secos y legumbres en la dietaEstos alimentos son ricos en omega 3, magnesio y zinc, elementos que estimulan la producción de serotonina y funcionan como antidepresivo natural. Practicar ejercicio o pasar más tiempo al aire libre también puede ser muy beneficioso, ya que la luz del sol mejora nuestro estado de ánimo.

Combinación de legumbres.

Horarios fijosPuede parecer obvio, pero dormir y descansar ocho horas es el mejor remedio para combatir el cansancio. Además, establecer -en la medida de lo posible- unos horarios fijos para comer y cenar también contribuye a que nuestro organismo se adapte mejor a este cambio.

Desayuno energéticoUn buen desayuno a base de hidratos de carbono, lácteos y vitaminas es fundamental para cargar las pilas desde primera hora de la mañana y hacer frente a la jornada que nos queda por delante.

Un desayuno rico en fibras hará que ingiramos menos calorías el resto del día.

Hidratación suficienteSe recomienda beber dos litros de agua de manera general, aunque esta cantidad varía dependiendo del sexo y de la edad. No estar bien hidratado provoca dolores de cabeza y aumenta la sensación de sueño y de cansancio.