Tarazona Monumental convierte la ciudad en un museo al aire libre

Este fin de semana se han realizado actividades para celebrar el Día Internacional de los Museos.

Los talleres se han desarrollado en un solar del casco antiguo.
Los talleres se han desarrollado en un solar del casco antiguo.
Nora Bermejo

‘Tarazona, ciudad museo’. Bajo este lema, la Fundación Tarazona Monumental ha celebrado este fin de semana diversas actividades por el Día Internacional de los Museos. El objetivo se ha cumplido, y es que la idea era concienciar a vecinos y turistas de que el municipio merece ser considerado un museo al aire libre.


El balance es positivo, y como indica el gerente de Tarazona Monumental, Julio Zaldívar, ha ido “muy bien y siempre que hay respuesta del público, eso nos da energía para seguir trabajando”.


La primera cita de la programación contó el sábado con la participación del grupo de teatro local ‘La ciudad no es para mí’, quienes representaron cinco conocidas obras de arte de la ciudad: la talla procesional de María Magdalena, la cabeza del emperador Augusto, el cuadro de uno de los obispos de la ciudad, una imagen de San Cristóbal y otra de una de las sibilas que hay en el cimborrio de la catedral.


“La verdad es que quedó muy sorprendente, la gente incluso pensaba que era un poquito de broma, como una cámara oculta. Fue muy divertido, porque cada uno de los personajes contaba su historia. Sorprendió y gustó, gracias a una gran caracterización y teatralización”, opina Zaldívar.


Por la noche, en torno a treinta personas, participaron en una visita temática en la que se recorrieron las diversas salas de este museo al aire libre que es Tarazona. “También fue muy divertido porque por el recorrido fueron apareciendo los personajes típicos de un museo, como la taquillera, el guarda de seguridad, los guías, personal de limpieza…”, explica el gerente.


Este domingo por la mañana se han desarrollado actividades de limpieza, reciclaje, jardinería y pintura en un solar abandonado del casco histórico, para dignificarlo. “Han participado niños y mayores, pero siempre desde un punto de vista pedagógico para motivar a la gente a que defienda nuestro patrimonio porque hasta los solares es interesante que los mantengamos limpios”, dice Julio Zaldívar.


Así, entre otros talleres, se ha realizado una jardinera con unos palés reciclados y se han colocado contenedores “para que la gente tire la basura donde tiene que ser, en las papeleras”.


“De vez en cuando hay que hacer campañas de este tipo porque el resultado es en beneficio de la ciudadanía”, concluye Zaldívar, satisfecho con el resultado obtenido.