Yasmina Praderas: "Ganar un Goya te da más visibilidad y es un acicate para no bajar el nivel de autoexigencia"

Ha pasado ya un año desde que conquistara su primer Goya por ‘As bestas’ y este sábado opta al segundo. ¿Cómo ha metabolizado todo este éxito?Con muchísima ilusión y emoción. Ganar un Goya es algo muy bonito, difícil de explicar.

¿Cómo vivó la gala?He de reconocer que con muchísimos nervios al principio. El nivel de las películas que estábamos nominadas era muy alto y nunca tienes claro que puedan nombrarte. Son momentos de tensión que cuando recoges el premio cambian en una alegría desbordante. Dan ganas de compartirlo y disfrutarlo con tus compañeros y amigos.

¿Qué es lo primero en lo que pensó al saberse ganadora?Lo primero que pensé es en si iba a ser capaz de decir el texto que tenía pensado por si acaso. Los nervios son muy grandes y lo hacen todo más complejo. El escenario y el ambiente impresionan. Cuando lo superas y te llevas el Goya, solo queda compartirlo con los integrantes del equipo de la película que están allí, con Rodrigo Sorogoyen a la cabeza, con el que siempre es un lujo trabajar. De alguna manera, es la clave para que nosotras luzcamos.

¿Le llevó el Goya a sus padres, abuelos… en Huesca?¡Claro! El Goya ha dado muchas vueltas. Estuvo varios meses en Huesca de un lado para otro. Hicimos comidas familiares, lo celebré con mis amigas e incluso llevamos la estatuilla por ahí de cena.

¿Una conquista así hace más feliz por lo que supone para sus más allegados que por una misma?Totalmente. Es cierto que al final llegas a la conclusión de que es así. El hecho de ver la ilusión que le hace a tu gente más cercana produce una emoción más intensa que el propio hecho en sí mismo. El reconocimiento es importante y el esfuerzo está, de eso no hay duda. Pero mi día a día tiene que ser el mismo. De hecho, poco después de la gala ya comencé con el trabajo en otra película y regresé de sopetón a la realidad. Compartirlo con los amigos y la familia es la parte más bonita.

¿En lo profesional se nota el plus de haber ganado un Goya?Sigo trabajando como siempre, pero es un acicate para no bajar el nivel de autoexigencia. El Goya te da más visibilidad. La gente te conoce y busca tu trabajo. En los últimos años mi nivel de encargos va creciendo y el hecho de ser más visible ayuda mucho.

Este sábado asistirá a la gala en Valladolid con dos candidaturas, por ‘Campeonex’ y por ‘Saben aquell’. ¿Va más liberada tras el éxito del año pasado?El hecho de estar nominada ya es un premio. Supone ser una de las cinco películas elegidas de las 200 que se han hecho en un año. La competencia es feroz. Por ejemplo, compito con ‘La sociedad de la nieve’, que me parece una maravilla sonora y reconozco que sería un premio merecidísimo. Nunca se sabe lo que va a pasar pero este año el nivel es altísimo.

¿Cómo ha sido su trabajo en los dos filmes por los que está nominada?Son dos películas muy distintas, ambas con sus dificultades. En ‘Campeonex’, el tema de la inteligibilidad por parte de los actores era un aspecto a tener muy en cuenta para que el espectador pudiera disfrutar de los diálogos. ‘Saben aquell’ tiene otra dificultad. Su apariencia es más llana y sencilla pero subyace un trabajo de generar un color y una dinámica un poco más contenida, con la voz de Eugenio, los lugares en los que contaba sus chistes y las canciones de su mujer Conchita. Ha sido muy intensa la labor y requería de bastante concentración.

Tendrá la agenda repleta de compromisos.Mi agenda sigue repleta y no paro de trabajar. Me siento una privilegiada porque estoy en un lugar único al que no todo el mundo tiene acceso. Estoy agradecida y acompañada por estar donde estoy