Zaracadabra cierra una nueva edición con más de 2.500 espectadores
Los seis ilusionistas han convertido Zaragoza en un escenario navideño lleno de ilusión y sueños.
El Festival de magia Zaracadabra de Zaragoza ha cerrado su undécima edición con un rotundo éxito tras recibir más de 2.500 espectadores que han llenando la mayoría de los espacios escénicos de la ciudad en los que se han celebrado los quince espectáculos.
Los seis ilusionistas destacados que han participado en este festival desde el pasado día 26 y hasta este viernes han convertido Zaragoza en un escenario navideño lleno de ilusión y sueños, han informado los organizadores en una nota de prensa.
El festival se ha desplegado en nueve espacios, desde la plaza del Pilar hasta diversos centros cívicos y museos que han acogido una amplia gama de espectáculos accesibles para todo tipo de público.
La diversidad de escenarios y la gratuidad de la mayoría de los eventos han contribuido a convertir a Zaragoza en la capital internacional de la magia durante estas fechas.
Entre los objetivos del festival se encuentra el acercamiento del mundo del ilusionismo a todos los públicos, dignificando al máximo este arte y promoviendo la participación de las mejores ilusionistas, incluidas mujeres, que, aunque en menor número en esta disciplina artística, han tenido un espacio destacado en esta edición.
Las representaciones, desde la inauguración con Francis Zafrilla hasta las diversas actuaciones en los diferentes escenarios, han atraído a audiencias numerosas, con llenos absolutos en varios centros cívicos y el Museo del Fuego. Destacaron los espectáculos internacionales como "The latex king" de Jean Philippe (Francia) y "The gran showman" de Maxi (Argentina).
Los ilusionistas nacionales como Martilda (Valladolid), con su espectáculo "Diario de una ilusionista", y Juan Capilla, que presentó "Humor e imposibles", también cautivaron al público con su arte mágico y participativo.
El festival, que cada año reúne lo mejor de la magia internacional y nacional, ha consolidado su posición como uno de los eventos más esperados y destacados en Zaragoza durante la temporada navideña, ofreciendo una experiencia llena de emoción, humor y sorpresas para todas las edades.
