The Bluegrass Lions: «Las canciones de Joaquín Carbonell hacen mejor a nuestra tierra»
La banda acaba de publicar un álbum en el que adapta al folk norteamericano temas del cantautor aragonés.
En el barrio rural de Casetas, en Zaragoza, suenan con frecuencia ritmos del interior de Estados Unidos. Proceden de la taberna Vinos Chueca, donde su propietario, el músico Roberto Artigas (GranBob), alimenta la inspiración de The Bluegrass Lions, una banda en la que canta y toca el contrabajo, la armónica y el banjo junto a Allué Fiddle (violín y mandolina), Julio López (guitarra), Gaby Morgan (banjo) y Javier Marín (guitarra).
Acaban de publicar el disco ‘Los 1.300 besos de tornillo’, un tributo bluegrass al añorado cantautor Joaquín Carbonell, quien además formó parte junto a GranBob y David Giménez del grupo Los 3 Norteamericanos. El título del nuevo álbum está sacado de una canción de Carbonell, y es «un homenaje a sus canciones, su vida y su persona», cuenta Roberto Artigas ‘GranBob’, motor del grupo e impulsor del proyecto junto con el productor y multiinstrumentista Allué Cester.
El disco reúne una selección de canciones del cantautor aragonés interpretadas con instrumentos característicos del folk norteamericano como banjos, mandolinas, armónicas y violines, y en él han colaborado músicos y amigos como de Joaquín como Philippe Charlot, José Luis Arrazola, Eduardo Paz, Richi Martínez, David Giménez, Pepe Vázquez y Kalina Fernández. «Era muy importante para nosotros contar con la gente que quería a Joaquín. También su familia nos ha apoyado mucho, así como la fundación Joaquín Carbonell, de Alloza, quienes han colaborado en la edición del disco», explica Artigas.
Presentación en Casetas
Las canciones de este elepé llevan sonando en directo desde hace más de un año, aunque The Bluegrass Lions quiere hacer una puesta de largo en próximas fechas. «Nos encantaría presentarlo en el Centro Cívico Joaquín Carbonell de Casetas, donde ya hicimos un homenaje a Joaquín, con la colaboración del Ayuntamiento del barrio. Mientras tanto presentamos el disco allí donde hay instrumentos y público a quien le apetezca escuchar sus canciones –añade–. En Vinos Chueca por ejemplo, lo hacemos a diario, al más puro estilo Carbonell, sin móvil ni coartada».
La adaptación de las canciones del cantautor aragonés al bluegrass ha surgido «de forma muy natural, pues el folk americano y universal está muy presente en muchas de las canciones de Joaquín y su sentido del ritmo y la armonía bebe de las mismas fuentes, sea en forma de canción pop, manouche o jota, sin ir más lejos», subraya.
«Joaquín ha sido uno de los grandes creadores de cultura de Aragón, sus canciones son inmensas y hacen mejor a nuestra tierra. Nuestra intención es contribuir a su difusión para que quienes las conocen puedan disfrutarlas, y quienes no, descubran a este gran creador aragonés», concluye.
