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Aaron Palacio, triunfador de la I Convivencia de Escuelas Taurinas
El joven zaragozano se impuso este domingo en la final del certamen organizado por Mar de Nubes, celebrada en la ganadería Valtaja (Guadalajara).
Aaron Palacio fue proclamado el pasado domingo triunfador de la I Convivencia de Escuelas Taurinas organizada por Mar de Nubes. A sus 14 años, el prometedor torero zaragozano se impuso a los compañeros de los centros de Huesca, Valencia, Alicante y Guadalajara, donde, en la finca de la ganadería Valtaja y con erales de Ángel Luis Peña, se celebró la final.
Ignacio Boné, Daniel Artazos, Angelín, Carla Otero y Palacio, mejores clasificados en los tentaderos programados a lo largo de marzo y abril en en las ganaderías de Sandra Sopeña, Daniel Ramos (dos), Hermanos Marcén y Hermanos Ozcoz, fueron los finalistas de un certamen en el que el alumno de Mar de Nubes aventajó por muy poco a Otero.
Además de Aaron Palacio e Ignacio Boné, en esta I Convivencia de Escuelas Taurinas, que se organizó cumpliendo las pertinentes medidas anti covid, participaron otros 10 chavales aragoneses: David Sejas, Jorge Mallén, Miguel Porta y Bryan Bautista (Huesca); Daniel Artazos (Escuela de Valencia, aunque nacido en Sobradiel); Fran Fernando, Roberto Martín, Marta Borao y Nabil Essaouari (Navarra).
“Para los chicos que empezamos, eventos como este son lo máximo. Ha sido un día muy especial para mí. Este triunfo es un estímulo para seguir entrenando como hasta ahora, con el objetivo de torear alguna novillada en verano”, explicaba Aaron Palacio tras ser proclamado triunfador del certamen, y destacaba el “esfuerzo” que conlleva la profesión de torero.
Palacio compagina las clases de 4ª de la ESO con los entrenamientos. Martes, jueves y domingo entrena con el grupo de Mar de Nubes al completo. El resto de los días, completa la preparación con el director de la escuela taurina, Miguel Cuartero, quien define a Aaron como un chico que vive el toreo con “mucha intensidad” y tiene “muy claro” que quiere dedicarse a ello.
“Quiere ser figura. Lo repite todos los días con una firmeza inusual”, añade Cuartero, sobre un chico que persigue el concepto de pureza y naturalidad, de respeto por la profesión. “Tiene personalidad. A su edad, no es normal ver alguien tan distinto al resto”, concluye.
