NOVELA HISTÓRICA. OCIO Y CULTURA

José Luis Corral rescata del olvido a la reina Petronila y asume su voz

El escritor presentó ayer su novela sobre la hija de Ramiro II 'el Monje' e Inés de Poitiers cuya boda dio lugar a la creación de la Corona de Aragón

José Luis Corral publica 'Petronila. La reina olvidada' en Doce Robles.
El escritor cuenta su novela en primera persona.
Guillermo Mestre.

ZARAGOZA. Uno de los grandes personajes de la Historia de Aragón, de vida breve, fue Petronila, hija de Inés de Poitiers y de Ramiro II ‘el Monje’, que dejó el monasterio por un tiempo para engendrarla y luego regresar a la oración. Alfonso I ‘el Batallador’, tras su muerte en Poleñino en 1134, había dejado el reino de Aragón a las órdenes militares. La dinastía real iniciada por Ramiro I parecía concluir; por ello su hermano Ramiro tuvo que abandonar los hábitos de monje, sentarse en el trono y cumplir con la primera obligación del monarca de aquel tiempo: tener descendencia. De aquella unión nació Petronila (1136-1173), que sería clave como soberana y en el futuro de la Corona de Aragón.

Una criatura relegada

"La reina de Aragón, y luego condesa de Barcelona, cumplió con éxito lo que se esperaba de ella", dice José Luis Corral (Daroca, 1957), que presentaba ayer en Caja Rural ‘Petronila. La reina olvidada’ (Doce Robles). "Como indica el título, era una reina olvidada, relegada a un segundísimo plano por la historia y la historiografía. Me pareció de justicia dedicarle una novela", explica. Y no una novela cualquiera (barajó editarla con seudónimo), sino una ficción reivindicativa que narra en primera persona. Asume la voz de la mujer que se casaría con Ramón Berenguer IV.

"He usado un lenguaje actual, pero ha sido todo un reto meterme en la cabeza de una mujer, en este caso una reina del siglo XII. Primero por intentar sentir y escribir como una mujer de esa época y de su condición, y además por intentar captar el espíritu de ese tiempo desde una perspectiva que no es la mía sino la de la protagonista. En el proceso de escritura he tenido que olvidarme de José Luis Corral para convertirme en Petronila de Aragón. Eso ha sido lo mas difícil", confiesa el Premio de las Letras Aragonesas de 2017.

Corral, que ha dedicado novelas a Alfonso I ‘el Batallador’ y a Jaime I ‘el Conquistador’, entre otros monarcas, intenta responder en el libro qué le debe Aragón a la reina Petronila. «Desde luego la fundación de la Corona de Aragón como una formación política extraordinaria e inédita hasta entonces en la Edad Media. Pero, además, saber mantener el honor y el linaje de una familia como la de los Ramírez-Aragón y sostener la continuidad de una dinastía. Sin Petronila, quizá ella ni siquiera lo supiera, Aragón, España y Europa actuales no serían iguales».

Siendo una niña de 13 años fue ‘ofrecida’ a Ramón Berenguer. Se llevaban más de 20 de diferencia. El autor analiza su vínculo y las claves de su reinado. "La relación de los dos esposos fue extraordinaria en la Europa de su tiempo. Que se sepa, el conde de Barcelona, que tenía 23 años más que su esposa, la respetó de manera asombrosa para un rey de la época. Por ejemplo, no se le conocen a Ramón Berenguer IV relaciones extramatrimoniales, ni hijos bastardos una vez se casó con Petronila en 1150. Y eso, es rarísimo en los reyes y príncipes medievales", aclara.

El abandono de los padres

José Luis Corral insiste que es un libro de ficción con numerosas claves históricas que nacen de la investigación, del estudio, del intento que fijar su mito y su verdad para siempre. "La primera licencia que me permito, y la más importante, es meterme de pleno en su cabeza, claro. Y a partir de ahí interpretar el mundo de su tiempo desde la ficción de una persona real, como fue Petronila, pero que ha sido creada por un historiador y escritor del siglo XXI". La ficción no se reduce a la existencia y a las aventuras de la joven reina: el autor de ‘El invierno de la Corona’ y ‘El Cid’, ha dado vida a una mujer de la corte que es a la vez dama de compañía de la reina y que cumple un papel muy importante en su educación. "Esa dama, Eulalia, es el paradigma de muchas mujeres que estaban junto a las reinas en las cortes medievales pero apenas asoman en la historia", señala.

"La primera licencia que me permito, y la más importante, es meterme de pleno en su cabeza, claro. Y a partir de ahí interpretar el mundo de su tiempo desde la ficción de una persona real, como fue Petronila, pero que ha sido creada por un historiador y escritor del siglo XXI"

Petronila apenas conoció a sus padres. "Inés de Poitiers, viuda y con tres hijos varones, vino a Aragón con la exclusiva misión de casarse con Ramiro II ‘el Monje ‘y darle un heredero. Parió a Petronila el 11 de agosto de 1137 y apenas tres meses después ya estaba de vuelta en su tierra. Nunca volvió a Aragón, nunca volvió a ver a su esposo el rey Monje y nunca, que sepamos, volvió a visitar, ni siquiera a interesarse por su hijita, a la que dejó aquí con tres meses de edad. Esa relación es fundamental en los sentimientos que Petronila transmite en la novela".

La relación con el fugaz monarca Ramiro también fue igual de desalentadora: "Su padre apenas se preocupó de ella; de hecho, una vez firmados los esponsales en Barbastro en 1137, Ramiro II la dejó en manos del conde de Barcelona, y este la enviaría, con 5 años, a educarse a la corte de León, al cuidado de la reina Berenguela de Barcelona, esposa del leonés Alfonso VII y hermana de Ramón Berenguer IV. Metafóricamente, Ramiro II ‘el Monje’ se lavó las manos con respecto a la formación de su hija".

El escritor y Premio Cervantes Francisco Ayala, que también abordó este asunto en el libro de relatos ‘Los usurpadores’, intuyó un drama de amor imposible entre Inés y Ramiro.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión