ANTONIO IZQUIERDO, DE 72 AÑOS, SEGUÍA PRESO

Se ahorca el último de los asesinos de Puerto Hurraco que quedaba vivo

Antonio Izquierdo se quitó la vida en el que debía haber sido su último día en prisión, de no ser porque se le aplicó la 'doctrina Parot'.

Antonio Izquierdo, en 1994, recogiendo la sentencia por los crímenes de Puerto Hurraco.
Se ahorca en su celda el último de los asesinos de Puerto Hurraco que quedaba vivo
EFE

Antonio Izquierdo, de 72 años, el único que quedaba vivo de los hermanos que en 1990 asesinaron a tiros a nueve personas e hirieron a otras seis en Puerto Hurraco (Badajoz), se ha ahorcado en su celda de la prisión de Badajoz, han informado fuentes de Instituciones Penitenciarias.


Estas mismas fuentes han precisado que los funcionarios de la cárcel, que encontraron el cadáver del interno mientras hacían una ronda alrededor de las 2.00 del sábado, avisaron inmediatamente a los servicios médicos, que solo pudieron certificar su muerte.


El sábado, precisamente, era el día en que Izquierdo, que cumplía una condena de 25 años, hubiera quedado en libertad si no se le hubiese aplicado la 'doctrina Parot', por la que aún le restaban cinco años de pena por cumplir.


Izquierdo, que se encontraba interno en el módulo de enfermería debido a su delicado estado de salud, había mostrado su malestar por la aplicación de esta doctrina, según han detallado las fuentes consultadas.


El recluso fue condenado junto a su hermano Emilio, que murió de muerte natural en la prisión de Badajoz en 2006, a una pena de 344 años de cárcel cada uno por la matanza de Puerto Hurraco, que conmocionó a la sociedad extremeña y española el 26 de agosto de 1990.


Un año antes, también fallecieron sus hermanas, Luciana, de 77 años, y Ángela, de 64, tras quince años internadas ambas en el Hospital Psiquiátrico de Mérida por consejo de los médicos, aunque fueron absueltas en el juicio.