Alfonso Guerra: "El bipartidismo volverá porque era mejor que esto"
El exvicepresidente del Gobierno participó en el Foro de la Asociación de Directivos y Ejecutivos de Aragón, donde analizó la actualidad política española.
El exvicepresidente del Gobierno Alfonso Guerra (PSOE) ha afirmado este martes en Zaragoza que “el bipartidismo volverá porque era mejor que esto”, en referencia a la actual situación política del pluripartidismo en España, y ha defendido la Constitución ante los ataques que observa en el panorama político actual.
Guerra ha hecho estas declaraciones a los medios de comunicación después de participar en el Foro de la Asociación de Directivos y Ejecutivos de Aragón (ADEA), al que han acudido personalidades como el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, al que ha manifestado su cariño, y en el que ha repasado la actualidad del país.
El exmandatario socialista ha afirmado que el “desorden político” en España nace tras las elecciones de 2015 y 2016, fruto de una campaña “muy globalizada, muy extendida y muy intensa” contra el bipartidismo que llevó al pluripartidismo.
“Hay que preguntarse y responder con la mano en el corazón: ¿el Parlamento actual es mejor que el que era bipartidista? No es posible contestar que sí”, ha enfatizado en su discurso el exvicepresidente.
Además, ha abogado por la “colaboración” entre los partidos democráticos y se ha mostrado preocupado al observar “cómo los que son considerados como partidos constitucionales se afanan en lograr acuerdos con los que no lo son”.
En ese sentido, ha apuntado como una situación que podría tener consecuencias “funestas” que los partidos “del espacio de centroderecha y de centroizquierda se empeñan en mejorar la imagen de los grupos contrarios al sistema, cada uno al que tienen más próximo, así que los partidos de centro, en sentido general, promocionan a los extremos”.
Sobre esta colaboración entre partidos democráticos ha considerado, en declaraciones tras su discurso, como una “ocasión muy buena” las elecciones de abril de 2019, cuando “dos partidos democráticos sumaban 180 diputados y ninguno de los dos quiso hacer una alianza”.
Antes, en el foro, ha subrayado que “el elemento común de las propuestas de algunos partidos nacionalistas y populistas es la creación de inestabilidad en el sistema centrado en dos asuntos: derribar la monarquía y desconectar algunas, así le llaman, comunidades autónomas”.
De hecho, Guerra se ha mostrado alarmado porque “algunos partidos y personalidades han abandonado el general acuerdo de aceptación de la Constitución como un acta de paz”.
En cuanto a la Carta Magna, ha añadido que serían “muy convenientes” algunos cambios, pero “en ningún caso” abogaría por “una revisión total” ni por un nuevo proceso constituyente, algo que ha considerado “absolutamente innecesario”.
Interrogado por los medios, también se ha referido a la renovación del Poder Judicial, sobre lo que ha afirmado que el acuerdo para llevarlo a cabo le parece “fácil” y que consistiría en “sentarse en la mesa y poner nombres”, de manera que “si algunos no se aceptan, poner otros” hasta llegar a aquellos que sean “aceptables”.
Acerca del método de elección actual, en el Parlamento y no por los jueces, se ha mostrado partidario por que sean los diputados, ya que son “la Soberanía Nacional”, mientras que los magistrados “son 6.000 personas que han ganado una oposición”.
En cuanto a la mesa de diálogo entre el Gobierno y Cataluña, la ha descrito como “un fingimiento”, ha recalcado que él no acudiría y ha evaluado que de esa negociación “no sale nada”, más allá de que “probablemente” se ceda “en una cuestión de recursos económicos”.
Sobre este asunto, ha añadido que los nacionalistas saben que, en cuanto a autodeterminación y amnistía, el Gobierno de España “no puede de ninguna de las maneras concederlas”.
Además, se ha mostrado crítico con las primarias con las que los partidos, incluido el PSOE, eligen a sus líderes, de tal forma que los ha considerado “plebiscitos” con “graves consecuencias”, ya que “produce inmediatamente cesarismos”.
Precisamente, Guerra también se ha referido a los líderes de los dos principales partidos del país, el presidente del Gobierno, el socialista Pedro Sánchez, y el jefe de la oposición, el popular Pablo Casado.
Al primero le ha aconsejado “que no haga caso de ningún consejo” y “de nada de lo que le digan” quienes ha calificado como “todos esos gurús que se dedican a la imagen”.
Sobre Casado, ha afirmado que “no parece que sea una persona de relevancia”, a la vez que ha evaluado que “lo tiene complicado” con los “colmillos” que hay en los partidos políticos, “en el PP, en especial”.
Las preguntas del coloquio también le han llevado a abordar la situación de Juan Carlos I y ha indicado que resulta “decepcionante” que un rey “que ha tenido una trayectoria extraordinaria se vea ahora mezclado en un asunto económico”, aunque ha añadido que, aun suponiendo “que sea verdad todo eso”,
