El dilema del PP

Pablo Casado y Soraya Sáenz de Santamaría
Pablo Casado y Soraya Sáenz de Santamaría
Javier Belver/O. D.

A dos días del congreso del PP que elegirá al sucesor de Rajoy entre Soraya Sáenz de Santamaría y Pablo Casado, ni los más avezados en el manejo del Excel con la lista de compromisarios se atreven a aventurar un resultado. Incluso en Aragón, cuyo aparato se decanta por Casado y donde hay quien vaticina por lo bajini que este será el nuevo líder de los populares por un puñado de votos, se hacen apuestas firmes.

Todo está abierto y todo va a depender de lo que tenga en la cabeza cada uno de los compromisarios. Si estos votan en clave orgánica, defendiendo su estatus o para no perder demasiado, es probable un choque de bloques con un desenlace disputadísimo en el que Casado partiría con la ventaja de su alianza con Cospedal. Si lo hacen trascendiendo esa endogamia y pensando en el futuro, en quién puede ganar unas elecciones, la incógnita parece despejarse más claramente en favor de Soraya. Las encuestas dicen que es la preferida por el electorado y juega con la baza social –nada desdeñable– de que sería la primera presidenta nacional de uno de los dos grandes partidos y también la primera candidata de la democracia con opciones de presidir un gobierno. He ahí el dilema.