Meteorología

Vientos de 153 km/h y desvíos de vuelos por la borrasca 'Petra'

La ciclogénesis explosiva deja "incidencias menores" entre las que se incluyen la caída de árboles, cableado y contenedores.

La Policía Local de A Coruña ha acordonado los accesos a las playas debido a la alerta naranja en todo el litoral.
Vientos de 153 kilómetros por hora y desvíos de vuelos por la borrasca 'Petra'
EFE

El tiempo al revés. Tras un invierno primaveral, el aviso de un intenso temporal propio del mes de enero que de finales de abril ha vuelto a sorprender al tercio norte de España. Importantes rachas de viento y lluvias, olas de hasta 5 metros y 30 provincias en alerta. Así estaba siendo el paso de la ciclogénesis explosiva 'Petra' que no ha dejado incidentes graves en las comunidades afectadas.


La borrasca explosiva 'Petra', cuyo centro se sitúa en el sur de las islas Británicas, ha entrado en España por el norte. A su paso por la Comunidad gallega ha dejado rachas de viento máximas de 142,9 km/h en puntos del litoral coruñés como Cedeira y de 153 km/h en zonas de alta montaña en Lardeira -en Carballeda de Valdeorras-.


Además, las lluvias han dejado en doce horas 73 litros por metro cuadrado acumulados en Santa Comba; 50 en Lousame (A Coruña), Ribadumia y Fornelos de Montes (Pontevedra) y 46 litros en la localidad pontevedresa de Forcarei.


Lo cierto es que entre la noche y las primeras horas del miércoles durante el paso de la borrasca el 112-Galicia ha atendido unas 55 "incidencias menores" debidas al temporal que ha afectado a la Comunidad gallega, entre las que se incluye la caída de árboles, cableado y contenedores, así como tapas de alcantarillado levantadas.


Asimismo, el servicio de emergencia ha sido alertado de un accidente por un coche volcado en la calle Ramón Nieto de Vigo debido a una alcantarilla levantada. Este siniestro se ha saldado con una persona herida, que ha sido trasladada en una ambulancia asistencial al centro Perpetuo Socorro, según han indicado fuentes sanitarias.


Además, el temporal ha obligado a que la práctica totalidad de la flota gallega permaneciera amarrada a puerto debido al mar de fondo que mantiene activada la alerta naranja en el litoral de Galicia este miércoles por olas de entre cuatro y seis metros de altura.


En concreto, según los registros de Puertos del Estado, en la boya de Estaca de Bares se han alcanzado olas de 7,5 metros de altura, 6,45 en las Sisargas y 5,98 metros en Cabo Silleiro.


Lo cierto es que en la tarde de este miércoles se ha establecido, además, un dispositivo formado por medios aéreos, marítimos y terrestres para buscar un pescador que se precipitó al agua en una zona rocosa del municipio coruñés de Camariñas.


El litoral gallego permanecerá en alerta naranja hasta el mediodía del jueves, día 26 de abril, por mar de fondo del Noroeste con olas de cuatro a cinco metros de altura.


Según el boletín de tiempo meteorológico adverso, en este jueves las bajas presiones se alejarán de Galicia, por lo que únicamente la Comunidad gallega quedará en alerta por el mar de fondo de la borrasca del día anterior. A partir de las 12.00 el nivel de alerta bajará a amarillo por mar de fondo del Noroeste, con olas de tres a cuatro metros de altura.


A las 12.00 han dado por finalizada la alerta naranja


También, el País Vasco se ha visto afectado por las fuertes rachas de viento registradas durante las últimas horas. Éstas han superado los 130 km/h en Orduña, Punta Galea y Matxitxako, según los datos hechos públicos por la Dirección de Atención de Emergencias y Meteorología del Gobierno vasco.


Y es que Euskadi ha permanecido con la alerta naranja por fuertes vientos activada desde la pasada medianoche hasta las doce del mediodía. A partir del mediodía y hasta las seis de la tarde, ha permanecido activo el aviso amarillo ante la posibilidad de que se registren rachas de viento del suroeste de 100 km/h en zonas expuestas. En áreas no expuestas, alcanzarán los 70-80 km/h en el este y los 80-90 km/h en el oeste.


Además, para la jornada del jueves, se activará el aviso también amarillo, en este caso, por riesgo marítimo costero desde la medianoche hasta las doce del mediodía, ya que la mar de fondo del noroeste levantará olas de 2,5 a 3 metros. La altura de ola significante oscilará entre los 3,5 metros.


También, los bomberos de Bilbao han realizado diversas salidas por incidentes, aunque no graves, según han informado a fuentes municipales.


Estas mismas fuentes han indicado que el Jefe de Bomberos de Bilbao ha manifestado que "salidas importantes, de relevancia, graves no habido ninguna", pero sí alguna salida por alguna fachada o algún árbol, o una ikastola a la que se ha desprendido una teja, pero que ya se ha solucionado.


Desvío de vuelos

 

Además, los fuertes vientos que han azotado el País Vasco han obligado a desviar tres vuelos procedentes de Madrid, Sevilla y París ante la imposibilidad de hacerlo en Loiu.


Según han informado a fuentes de Aeropuertos Españoles de Navegación Aérea (AENA), los aviones procedentes de Madrid y Sevilla han tomado tierra, finalmente, en Vitoria, mientras el de París, de la compañía Air France, ha sido desviado a Biarritz.


También, el fuerte viento que se ha registrado en Cantabria ha obligado a desviar a Vitoria un avión procedente de Madrid con destino a Santander, cuyos pasajeros han sido trasladados por carretera a la capital cántabra.


El mismo avión tenía previsto realizar el viaje de vuelta a Madrid, que se ha suspendido, y los pasajeros que lo esperaban en el aeropuerto de Parayas han sido recolocados en vuelos posteriores, según ha informado fuentes de Aena.


Y es que el fuerte viento ha dejado esta madrugada rachas de hasta 101 kilómetros por hora en Reinosa, concretamente a las 5.20 de la madrugada, según datos de la Agencia Española de Meteorología (AEMET) consultados.


Además, ha provocado cuatro incidencias la pasada noche en Cantabria, relacionadas fundamentalmente con la caída de ramas y árboles en la calzada, según ha informado el Gobierno de Cantabria.


En concreto, las incidencias se han registrado en Santa María de Cayón, por la caída de una rama en la calzada en la CA-142, en el kilómetro 14; en Anievas, donde había un cable colgando con riesgo de provocar un accidente, en la CA-271; en San Vicente de la Barquera, donde había ramas en la CA-847; y en Ruesga, donde había un árbol en la calzada, en la CA-266.

La flota cántabra sale a la mar ante el cese de las rachas de viento


Lo cierto es que parte de la flota cántabra de cerco y artes menores ha salido a la mar a mediodía de este miércoles ante el cese de las fuertes rachas de viento registradas a primera hora de la jornada.


En Colindres, por ejemplo, todos los barcos han salido a media mañana, y en Castro Urdiales, la mitad de los barcos de artes menores han salido a echar aparejos, mientras que el único de cerco que hay ha permanecido amarrado, según ha informado a Pablo Villasante, responsable de la cofradía castreña y exvicepresidente de la Federación de Pescadores.


Por su parte, los pescadores confían en que el tiempo mejore para poder salir a faenar este jueves, ya que con los barcos atracados "las pérdidas son bastante grandes". Villasante ha indicado que aunque se retome esta semana la actividad, probablemente los barcos de cerco no inicien la costera de la anchoa hasta el próximo lunes, ya que se tienen que desplazar hasta el golfo de Vizcaya y "no compensa" ir para un día o dos, más si se tiene en cuenta el elevado precio del gasoil.


Según ha precisado, la flota de artes menores lleva unos diez días sin salir a la mar, mientras que la de cerco no ha faenado en lo que va de semana ni en la anterior. Tampoco han empezado, estos últimos pescadores, la costera de la anchoa, aunque los informes biológicos y científicos apuntan a que sí hay bocarte suficiente en el golfo de Vizcaya.