En el año en el que Dacia cumple 10 años en España, la marca presume de haberse posicionado "en un lugar privilegiado en cuanto a ventas, con continuos crecimientos". Y si esos datos se trasladan al Dokker, el vehículo polivalente y comercial del fabricante que se aprovecha de toda la tecnología de Renault, se confirma todavía más. Se trata de un vehículo que ha tenido tal acogida que, por ejemplo, en Zaragoza, "la cuota de penetración de la marca es del 6% y el Dokker se ha convertido en líder indiscutible de los industriales".

El nombre Dokker hace referencia a la palabra inglesa ‘dockworkers’, empleada para designar a los estibadores. Se destaca así la gran capacidad de carga, tanto del normal como del Van, su modularidad y su robustez.

Las líneas y las proporciones de ambas carrocerías anuncian su gran habitabilidad, con 4,36 metros de largo, 1,75 de ancho y 1,81 de alto. Esta sensación se ve reforzada por los flancos de la carrocería verticales, lisos y sobrios. El ancho de las puertas laterales correderas y las traseras asimétricas aportan un acceso fácil al habitáculo y a la zona de carga.

El tratamiento sencillo de los volúmenes exteriores, las formas macizas y las líneas sobrias expresan la robustez, aspectos intrínsecos a los criterios fundamentales de la marca. La línea de cintura también es alta y las dimensiones de las empuñaduras generosas, lo que acentúa aún más esa impresión. Los Dokker están dotados de serie con paragolpes negros de acabado rugoso que cubren todo el bajo de carrocería delantero, hasta por debajo de los faros. Los completan unos parachoques traseros bien colocados para proteger las ópticas y unas molduras laterales (según las versiones).

Los parachoques pintados del color de la carrocería, una referencia a los códigos tradicionales de los vehículos particulares, están disponibles en opción y hacen su aparición a partir del equipamiento Ambiance.

Moderno y funcional

El interior se ha construido en torno a un salpicadero moderno y funcional que ofrece múltiples espacios portaobjetos ideados para un uso intensivo. Las amplias superficies redondeadas refuerzan la sensación de solidez. Según el acabado, el revestimiento bitono del salpicadero también aparece en los paneles de las puertas. El nuevo diseño de los contadores, heredado del Dacia Lodgy, y la integración del sistema multimedia Media Nav modernizan el ambiente a bordo y le proporcionan un aspecto más tecnológico.

Los avances realizados en el Lodgy, en materia de ergonomía, también benefician a ambas carrocerías. Los dos cuentan con los nuevos mandos de limpiaparabrisas y de faros. Los de los elevalunas eléctricos se encuentran en los reposabrazos de las puertas y los de la climatización están más accesibles, por ejemplo, que los de la familia Logan.

El Dacia Dokker es capaz de transportar cómodamente a cinco personas, a la vez que les ofrece un gran maletero para todo su equipaje: 800 litros y una longitud de carga de 1,16 m. La banqueta se pliega contra la parte posterior del respaldo de los asientos delanteros, con lo que se consigue un piso plano de 1,57 metros de largo y 3 m3 de volumen útil. La modularidad de su banqueta trasera (2/3–1/3) permite elegir entre varias configuraciones.

Casi 4 m3 de carga

La capacidad de carga del Van aumenta gracias al Dacia Easy Seat. El asiento del pasajero se abate en bandeja y se pliega contra la guantera para liberar un espacio de carga de 2,42 metros de largo. Puede, incluso, sacarse del vehículo, dejando así un volumen de carga de 3,9 m3. Esta última configuración permite cargar fácilmente objetos de 3 m de largo (longitud de carga: 3,11 m).

La oferta de motores consta de uno de gasolina 1.6 MPI, de 85 cv (desde 9.536 euros, para el equipamiento base; y 10.533, para Ambiance), y de un motor diésel 1.5 DCi, disponible en 75 cv (11.388 euros) y 90 (11.900).

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