Más de 5.000 detenidos en Rusia en una nueva jornada de apoyo a Navalni
Las fuerzas de seguridad retuvieron durante cuatro horas en comisaría a la esposa del líder opositor, Julia, que participó en la manifestacion de Moscú.
Decenas de miles de personas participaron este domingo en Rusia en las manifestaciones convocadas en 142 ciudades a lo largo y ancho de todo el país, pese al intenso frío. Lo hicieron en demanda de la puesta en libertad del principal adversario del Kremlin, Alexéi Navalni, arrestado el pasado 17 de enero nada más regresar de Alemania, a donde fue enviado en estado de coma para recuperarse del envenenamiento sufrido el pasado verano en Siberia.
Su esposa, Julia Naválnaya, también salió a la calle en Moscú para protestar y fue detenida por la Policía. Tras casi cuatro horas en la comisaría, le dejaron irse a casa. El número total de arrestados en toda Rusia, según OVD-Info, una web que monitorea las acciones represivas de la Policía, se cifró en 5.135, récord absoluto de arrestos hasta ahora en una manifestación. Ha habido detenidos en casi un centenar de ciudades, entre ellos periodistas, según defensores de la libertad de prensa citados por la radio Eco de Moscú. Tales fueron los casos de los célebres Serguéi Parjómenko y Andréi Pivovárov. Éste último se encontraba en compañía del político opositor Iliá Yashin, que también fue arrestado.
Las movilizaciones comenzaron en Vladivostok, en el Extremo Oriente ruso, donde, de igual forma que el sábado 23, la Policía volvió a intervenir con extrema dureza. Allí el número de detenidos supera ya el centenar. Después, las acciones de protesta se desplazaron hacia el oeste, a través de las distintas franjas horarias. En Novosibirsk y Ekaterimburgo tuvieron lugar las concentraciones más numerosas, de unas 12.000 personas en ambos casos, según la publicación digital Otkritie Media (Open Media). Sus datos señalan cerca de 10.000 participantes en la convocatoria en las 40 ciudades más grandes de Rusia.
La plaza Sénnaya, cerca del centro de la antigua capital imperial rusa, fue el punto de mayor afluencia de público y, por tanto, escenario de numerosos arrestos y fuertes choques con la Policía, que utilizó gases lacrimógenos, según algunos medios de comunicación. Distintos canales de Telegram cifraron en más de 20.000 personas, más incluso que en Moscú, la cantidad de gente que se echó a la calle en San Petersburgo, donde, según OVD-Info, se produjeron más de un millar de detenciones.
Bloqueo de zonas
En la capital rusa también las protestas quedaron aisladas en distintos entornos debido a que el lugar inicial de la convocatoria, la plaza Lubianka, donde se erige la sede del FSB, los servicios secretos rusos, fue bloqueada ya el sábado al igual que toda la zona que rodea el Kremlin. Siete estaciones de metro del centro dejaron de funcionar desde la mañana y otras muchas, no anunciadas de antemano, también fueron clausuradas a medida que las protestas se movían de un lado para otro.
El primer sitio alternativo de la manifestación fue la plaza Sújarevskaya, en la parte noreste del Anillo de los Jardines. Allí se produjeron enfrentamientos con los antidisturbios (OMON) y la Guardia Nacional y comenzaron los arrestos a nivel masivo. La manifestación avanzó hasta la plaza de Krásnie Vorota y, a continuación, a la llamada plaza Komsomólskaya o de las Tres Estaciones, de ferrocarril, donde la Policía intervino de nuevo. Fotos difundidas por las redes sociales muestran cómo algunos agentes emplearon aparatos de electroshock contra los manifestantes.
Los grupos que quedaron disueltos continuaron después la marcha hacia el parque Sokólniki y una pequeña parte hacia el penal de Matrósskaya Tishiná, donde se encuentra recluido Navalni. Allí estaban esperándoles las fuerzas OMON. Las cifras de participantes en la acción de protesta en la capital rusa varían según las fuentes entre unas 2.000 que estima el Ministerio del Interior hasta los 15.000 que facilita Open Media.
Pese a la represión de la que es objeto, la organización de Navalni convocó otra acción de protesta para este martes, a las 10.00, ante el edificio del Tribunal Símonosvki de Moscú. Es la hora a la que se celebrará la vista para decidir si al líder opositor le cambian la pena «condicional» de tres años y medio de prisión del 'caso Yves Rocher', en el que está imputado por supuesta estafa y blanqueo de capital, por cárcel real.
