coronavirus

Trump conocía desde febrero la gravedad de la covid-19, pero lo ocultó

El último libro del prestigioso periodista Bob Woodward revela que había sido advertido por el departamento de Seguridad Nacional.

Trump, durante un discurso este jueves en el aeropuerto de Michigan.
Trump, durante un discurso este jueves en el aeropuerto de Michigan.
Mandi Wright/TNS/dpa

El nuevo libro -titulado 'Rabia'- del célebre periodista Bob Woodward, quien desveló el histórico 'caso Watergate', ha provocado una nueva oleada de indignación contra Donald Trump tras la publicación de varios extractos y de audios de las hasta 18 entrevistas que mantuvo para redactarlo, que revelan que el presidente conocía la gravedad de la pandemia por la covid-19 pero la ocultó la los estadounidenses.

En una de las grabaciones más hirientes, perteneciente a una conversación telefónica mantenida el 7 de febrero, el propio Trump reconoce que el virus se contagia "a través del aire" y que es "muy delicado y complicado. Mucho más mortífero que la gripe".

Sin embargo, el candidato a la reelección mintió a la población sobre el riesgo del coronavirus, que durante el pasado invierno se propagó rápidamente y en la primavera alcanzó un nivel atroz de expansión para alcanzar ahora a la escalofriante cifra de 190.000 norteamericanos muertos.

Trump, que fue informado el 28 de enero por el consejero de Seguridad Nacional, Robert O'Brien, sobre la alta mortalidad del patógeno -y advertido además que la pandemia sería el reto más difícil de su mandato-, minimizó intencionadamente la letalidad para evitar el "pánico general".

'Rabia', que en realidad no revela nada que no se supiera ya, también ha puesto en la línea de fuego al prestigioso periodista por haber esperado meses -desde febrero hasta la publicación de su libro estos días- para hacer públicas las revelaciones del presidente sobre la pandemia. Y es que se considera que dicha información que podría haber ayudado a evitar miles de muertes.

La publicación ha disparado asimismo un fuerte debate sobre ética, en el que muchos compañeros acusan al informador más famoso -y mejor pagado- del país de ocultar datos vitales para impulsar las ventas de su libro sacándolo a la calle en el momento más propicio, cerca de las elecciones. Algunos han llegado incluso a calificarle de cómplice de Trump.

Woodward, de 77 años, ganador de dos premios Pulitzer, está ya retirado de 'The Washington Post', aunque mantiene aún su afiliación con el diario y el título honorífico de editor asociado. En su defensa, señaló que hasta junio no tuvo el contexto necesario para hacer públicas las cintas y que su trabajo iba destinado a un libro y no a suplir las crónicas de información diarias que se publicaban.

Woodward, que ha escrito sobre nueve inquilinos de la Casa Blanca, y su colega del 'Post' Carl Bernstein, llevaron a cabo la investigación sobre el 'caso Watergate' que provocó la renuncia de Richard Nixon el 8 de agosto de 1974. Fue una de los trabajos más famosos de la historia del periodismo y que fueron relatados en su libro 'Todos los hombres del presidente'.

La obra de Woodward no es el único quebradero de cabeza al que se debe enfrentar Trump estos días. Un nuevo escándalo, que acaba de emerger, revela que la cúpula del Departamento de Seguridad Nacional distorsionó la información de inteligencia para que coincidiera con la retórica y los intereses del presidente.

Según Brian Murphy, exjefe de inteligencia del departamento y destituido de su cargo en agosto, el secretario interino del área, Chad Wolf, le ordenó que minimizara la amenaza de la supremacía blanca violenta y que incluyera información sobre grupos violentos «de izquierda». Asimismo, el segundo del departamento, Kenneth Cuccinelli, le conminó a que suspendiera los análisis sobre la interferencia rusa.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión