Los visones y la covid-19: ¿reservorio original del virus?
Países Bajos ha decidido sacrificar a casi un millón de visones tras detectar 23 brotes de la enfermedad en granjas repartidas por todo su país.
El Gobierno de Países Bajos, donde se detectó por primera vez un posible contagio de covid-19 de visones a humanos en una granja, ha decidido esta semana sacrificar a casi un millón de estos animales para evitar una segunda ola de coronavirus. Las autoridades holandesas han tomado esta decisión tras detectar en las últimas semanas 23 brotes de la enfermedad en granjas repartidas por todo su país que se dedicaban a la cría de visones.
Cuando se supo del presunto contagio de visones a humanos, el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, no descartó que los visones pudieran ser el reservorio original del virus de la covid-19, si bien tal extremo todavía no se había confirmado. Tampoco ahora está ratificado este punto desde la Organización Mundial de la Salud. Pero los numerosos brotes detectados en las granjas de visones de Países Bajos apuntan en esa dirección, y de ahí el sacrificio de los animales. Las primeras investigaciones de las autoridades sanitarias neerlandesas, realizadas en abril, ya demostraban que el visón con covid-19 puede ser asintomático, y también sintomáticos: los cuidadores observaron problemas respiratorios y gastrointestinales entre estos mustélidos.
El virus encontrado en un miembro del personal de una granja mostró similitudes con el encontrado en un visón. Basándose en esta comparación, los investigadores concluyeron que es probable que un miembro del personal de una granja fuera infectado por el visón.
Después de esa investigación, según fuentes del Ministerio de Sanidad de Países Bajos, se hizo un seguimiento en las granjas que permitió detectar la covid-19 gracias a un rastreo "temprano" de casos desde abril hasta julio. Así, desde que se registró el primer caso, los animales se sometieron a pruebas semanales que evitaron el contagio de los empleados de estas explotaciones.
En total, decenas de miles de visones han dado positivo en las pruebas de cribado, por lo que han sido sacrificados para controlar una pandemia que cada vez más, amenaza con una segunda oleada que pondrá en jaque un sistema sanitario afectado aún por la primera.
Desde la asociación WWF se remitió una carta al Gobierno español pidiendo el cierre inmediato de las granjas de visones en España alegando el peligro para la salud tras los casos de contagio de covid-19 detectados en varias granjas de Holanda, y advertía de que estos animales puede actuar como un reservorio del virus. Pedían el cierre de granjas para "evitar la presencia de esta bomba biológica" en España, que tendría graves consecuencias para la salud y la biodiversidad.
En mayo, siete de los catorce empleados de la granja de visones de la localidad turolense de La Puebla de Valverde dieron positivo. Posteriormente, las pruebas practicadas a los animales dieron negativas. Desde entonces, se ha hecho un seguimiento de los animales que han conducido a la decisión de seguir los pasos de las granjas de Países Bajos y sacrificar a los visones.
