La OTAN avanza hacia fuerza de despliegue rápido para disuadir amenazas, que liderará España

Esta nueva fuerza, operativa en 2016, consistirá en una brigada terrestre de alrededor 5.000 efectivos.

Los ministros de Defensa de la OTAN dieron este jueves un paso más en la preparación de su nueva fuerza de alta disponibilidad para disuadir amenazas como el conflicto ruso-ucraniano o el auge del yihadismo, y España se ofreció para liderarla cuando esté plenamente operativa en 2016.


"Hoy hemos tomado decisiones importantes para nuestra defensa colectiva. Para garantizar que tenemos las fuerzas adecuadas en el lugar correcto y en el momento adecuado. Y para defender a todos los aliados contra cualquier amenaza, desde este o desde el sur", afirmó el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, en una rueda de prensa al término de la reunión en Bruselas.


La nueva fuerza que la OTAN quiere poner en marcha, bautizada "de punta de lanza", consistirá en una brigada terrestre de alrededor 5.000 efectivos apoyada por fuerzas aéreas, marítimas y especiales, cuyos primeros elementos estarán preparados para moverse en 48 horas y, el resto, en una semana.


Además, esta fuerza estará respaldada por otras dos brigadas en caso de enfrentarse a una gran crisis y, junto con la actual fuerza de respuesta de la OTAN -que a diferencia de la fuerza rápida necesitaba de semanas para movilizar a sus efectivos-, contará con un total de 30.000 tropas.


El ministro español de Defensa, Pedro Morenés, anunció este jueves el ofrecimiento de España para liderar esa nueva fuerza en 2016, cuando empezará a estar plenamente operativa desde la cumbre de líderes de la OTAN de Varsovia, previsiblemente a mediados de año.


Destacó que, en tanto que "nación marco", España aportará unos 3.000 efectivos a los que se unirán aproximadamente otros mil más procedentes del Cuartel General del Cuerpo de Ejército de Despliegue Rápido de la OTAN de Bétera (Valencia).


Morenés aseguró que esta fuerza servirá para "generar disuasión", y vio necesario "mostrar al mundo que la OTAN puede tener una reacción fuerte e inmediata".


Junto con España, también se han ofrecido para liderar esa nueva fuerza de manera rotatoria en los próximos años Francia, Alemania, Italia, Polonia y Reino Unido.


Para 2015, Alemania, Noruega y Holanda ya han anunciado que asumen el liderazgo de la fuerza en su etapa interina, mientras que el Reino Unido lo hará en 2017.


Esta nueva unidad de alta disponibilidad mejorará a la actual fuerza de reacción de la OTAN (RNF), para la que este año España garantiza el componente naval y, el próximo, el terrestre.


Stoltenberg recordó que los ministros de Defensa abordarán en su próxima reunión, en junio, asuntos pendientes como la financiación, que se mostró confiado en que será "común".


Los ministros también acordaron establecer "inmediatamente" seis primeras unidades internacionales de comando y control en Estonia, Letonia, Lituania, Polonia, Rumanía y Bulgaria.


Serán pequeñas estructuras de entre 30 y 40 efectivos cuya tarea principal será "estar preparados para un refuerzo de tropas aliadas caso de necesidad en esos países", dijeron fuentes de la Alianza.


Estarán compuestas de material "preposicionado", equipos pesados (como combustible, raciones, equipos de protección) que, al estar ya sobre el terreno, permitirían un despliegue más rápido de las tropas que fueran llegando en caso de producirse una crisis.


Stoltenberg también agradeció el trabajo de Alemania, Dinamarca y Polonia en el desarrollo del cuartel de cuerpos multinacionales del noreste, situado en la ciudad polaca de Szcecin, que "reforzará nuestra disponibilidad y capacidad de mando de las fuerzas desplegadas en Polonia y los países bálticos".


Asimismo, celebró la intención de Rumanía de poner a disposición un nuevo cuartel multinacional en el sureste.


Stoltenberg reconoció que "no hay una amenaza inmediata concreta" para los países aliados del este de Europa, pero señaló que este refuerzo responde al "comportamiento de Rusia en el este, cambiando fronteras mediante el uso de la fuerza", en referencia a la anexión de la península ucraniana de Crimea y su papel en esa crisis.


"Pero también es por lo que vemos en el sur", en alusión al repunte de extremistas yihadistas en Oriente Medio y el norte de África.