El presidente de Burkina Faso dimite después de tres días de protestas masivas y violentas

Tras el anuncio, el general Honoré Nabere Traoré ha asumido la presidencia interina.

Burkina Faso, protestas. Foto de archivo
El presidente de Burkina Faso dimite después de tres días de protestas masivas y violentas

El presidente de Burkina Faso, Blaise Compaoré, dimitió este viernes de su cargo después de tres días de protestas masivas y violentas en las calles del país que reclamaban su marcha tras 27 años en el poder, adonde llegó mediante un golpe de Estado.


"Declaro que el poder queda vacante para permitir la organización de elecciones justas y democráticas en 90 días", afirmó Compaoré en un comunicado firmado por él mismo y leído en la televisión burkinesa.


Tras este anuncio, el jefe de Estado Mayor, el general Honoré Nabere Traoré, asumió la presidencia interina en Burkina Faso con el objetivo de celebrar elecciones "lo más pronto posible".


Así, el Ejército informó en un comunicado de la suspensión de la Constitución de 1991 y la creación de un órgano transitorio "que se establecerá de acuerdo con todas las fuerzas de la nación para organizar una transición que permita volver a la vida constitucional normal".


Compaoré, que llevaba en el poder desde 1987 tras protagonizar un golpe de Estado en el que murió su antecesor, Thomas Sankara, justificó su decisión de dimitir por "la degradada situación sociopolítica y la amenaza de división dentro de nuestro Ejército".


Las multitudinarias protestas de ciudadanos y de la oposición continuaron este viernes, después de que este jueves por la noche Compaoré asegurara que por el momento seguiría en el poder y que lo abandonaría tras un "periodo de transición", cuando se comprometía a ceder el mando al presidente que sea elegido democráticamente.


Aunque no hay una versión oficial sobre el paradero de Compaoré, algunos testigos citados por los medios locales aseguran que, tras abandonar el Palacio de Kosyam, ya ha cruzado la frontera con Ghana en un convoy militar.


Las primeras noticias de la marcha de Compaoré llegaron de la mano del coronel del Régimen de Seguridad Presidencial Issaac Zida, quien anunció la dimisión del presidente ante decenas de miles de manifestantes que reclamaban la marcha del jefe de Estado en la Plaza de la Nación en la capital, Uagadugú.


En palabras del coronel, "el poder reside en el pueblo y es él el que decidirá las acciones a seguir", y el Ejército estará "al lado del pueblo".


Pese a la dimisión del presidente, los manifestantes siguen concentrados en la Plaza de la Nación, convertida en epicentro de las protestas que se iniciaron esta semana para reclamar la anulación de la enmienda constitucional que permitiría a Compaoré prolongar su mandato.


Tras conocer que el general Traoré estará al frente de la transición en Burkina Faso, algunos manifestantes gritaron "fuera el jefe de Estado Mayor" y clamaron el nombre del general retirado Kouame Lougué.


En los últimos días muchos han mostrado su deseo de que Lougué, que este jueves se unió a los manifestantes en la capital, sea el nuevo líder hasta que se celebren elecciones.


Durante la jornada de este viernes, también se registraron algunos incidentes violentos, como el saqueo por un grupo de manifestantes de la casa del hermano menor de Compaoré, François Compaoré, informó el portal de noticias 'Burkina 24'.


Las protestas contra el presidente de Burkina Faso arrancaron el pasado miércoles, cuando miles de personas se manifestaron en la capital al grito de "Veintisiete años es suficiente", en alusión al tiempo que lleva Compaoré en el poder.


Este jueves, las protestas se extendieron e intensificaron en todo el país, especialmente en Uagadugú, donde se desató el caos cuando centenares de manifestantes asaltaron e incendiaron el Parlamento de Burkina Faso en protesta por la votación de la enmienda constitucional.


Los manifestantes también asaltaron las sedes de la televisión y de la radio públicas, a las que obligaron a cortar la emisión, numerosas tiendas de la ciudad fueron saqueadas y las viviendas de diferentes ministros incendiadas.


Desde su independencia en 1960 hasta la llegada de Compaoré a la presidencia en 1987, la historia de Burkina Faso, antes conocido como Alto Volta, se ha caracterizado por una sucesión de golpes de Estado.


Compaoré llegó al poder el 15 de octubre de 1987, cuando un nuevo golpe de Estado destituyó al entonces presidente, Sankara, que fue ejecutado.