Valls suaviza el recorte a las pensiones más bajas

La congelación del salario de los funcionarios se eliminará cuando mejore la coyuntura económica.

Valls ha considerado las propuestas del ala moderada de su partido
Valls suaviza el recorte a las pensiones más bajas
AFP

El primer ministro francés, Manuel Valls, afirmó este jueves que suavizará su plan de recortes de 50.000 millones de euros con medidas en favor de las pensiones más bajas, al tiempo que se comprometió a poner fecha al final de la congelación de los salarios de los funcionarios cuando mejore la coyuntura económica.


De esta forma, el jefe del Gobierno responde favorablemente a las peticiones del ala más moderada del Partido Socialista (PS), que le había puesto estas dos condiciones para apoyar su plan en la votación consultiva que tendrá lugar el próximo martes.


De visita a una fábrica de reciclaje de caucho al oeste de París, Valls defendió su plan de recortes, que consideró "sin precedentes", y pidió a todos los diputados "coraje" para apoyarlo porque es lo que necesita el país.


Pero se mostró partidario de suavizarlo de forma "significativa" para los que tienen menores ingresos, sin precisar de qué manera.


"Los salarios modestos, las clases medias, los jubilados con pensiones bajas también tienen que participar en este esfuerzo, pero en función de sus ingresos. Estamos muy atentos a que su poder adquisitivo no se vea erosionado", afirmó el primer ministro.


Valls señaló que también tomará medidas fiscales para ayudar a los salarios más bajos, dentro de la ley de finanzas rectificada que se adoptará en junio próximo, pero tampoco dio más detalles.


El jefe del Gobierno francés señaló que la suavización del plan para los asalariados y pensionistas más modestos no es exclusivamente una demanda de los diputados socialistas, sino del conjunto de los parlamentarios.


En cuanto a la congelación de los sueldos de los funcionarios, otra de las medidas que contiene su plan de recortes, Valls indicó que, tal y como le pidieron el pasado martes los diputados socialistas, se incluirá una "cláusula de revisión" en función de la situación económica.


El plan de recortes de Valls, presentado este miércoles en el Consejo de Ministros, prevé congelar salarios de funcionarios, pensiones y determinados servicios públicos, con el fin de ahorrar 50.000 millones de euros.


Ese dinero será destinado, por un lado, a financiar la bajada de los impuestos patronales, valorado en 30.000 millones, que persigue incrementar la competitividad de las empresas y estimular el mercado laboral.


Por otro lado, los recortes buscan también cumplir con el compromiso de déficit de Francia con la Comisión Europea del 3 % en 2015.


El ala más izquierdista del PS se muestra contrario a este recorte porque considera que afecta sobre todo a las clases más modestas y, además, consideran que puede tener un influjo negativo en el poder adquisitivo y, por tanto, en la incipiente recuperación económica.