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El Govern sanciona con 900.000 euros a Renfe por el trato a viajeros durante una avería
Consumo demuestra que había "deficiencias" en la información ofrecida por Renfe respecto al servicio.
El Govern catalán ha impuesto una multa de 900.000 euros a Renfe por vulnerar los derechos de los consumidores durante una avería de la línea de Rodalies R2 Sud en Gavà (Barcelona) en mayo de 2023, que provocó afectaciones en la circulación de trenes durante tres semanas.
Según fuentes de la Agencia Catalana de Consumo, que ha tramitado el expediente, Renfe efectuó "prácticas comerciales desleales por acción o por omisión" porque no informó correctamente a los consumidores a la hora de decidir si compraban billetes para la línea averiada, cometiendo así una infracción "muy grave" que genera "desconfianza" hacia la red de transporte público.
El Consell Executiu aprobó en su reunión del pasado martes esta sanción, que aumenta en 200.000 euros el importe previsto inicialmente en el expediente (700.000 euros), que fue abierto en noviembre por la Agencia Catalana de Consumo tras de una serie de inspecciones de la R2 Sud.
De los 900.000 euros de la sanción, 700.000 corresponden al expediente de Barcelona; 100.000, al de Tarragona; y otros 100.000, al de la zona de Terres de l'Ebre, todas ellas a raíz de las irregularidades detectadas durante las inspecciones a la línea por incidencias hace justamente un año.
Las inspecciones revelaron alteraciones de los horarios y de los transportes alternativos, puntos de atención a los clientes cerrados y trenes anunciados como directos que después se paraban en todas las estaciones.
Con esto, Consumo demuestra que había "deficiencias" en la información ofrecida por Renfe respecto al servicio de la R2 Sud, que en aquel momento estaba afectada por una avería causada por un incendio en un cuadro de señales en Gavà.
Tras atribuirse inicialmente este incendio a un rayo, finalmente la investigación apuntó a un mal estado de la infraestructura.
Concretamente, había habido una rotura de un hilo de la catenaria que, debido a un acto vandálico del sistema de tierra que tenía que proteger las instalaciones, no pudo ser detectado automáticamente.
La avería tardó tres semanas en ser arreglada, lo que conllevó múltiples afectaciones a los usuarios de las líneas que pasaban por la estación, además de la R2 Sud.
