El Gobierno advierte a 30 grandes 'influencers' que los multará si mantienen su publicidad engañosa
El 75% de los referentes digitales investigados incumplen la normativa europea de protección al consumidor.
El Ministerio de Derechos Sociales ha comenzado a remitir cartas a más de una treintena de grandes 'influencers' españoles para advertirles que si mantienen en sus intervenciones por las redes sociales prácticas ilícitas como en las que hoy incurren, que pueden ser consideradas entre otras infracciones como publicidad engañosa, comenzará a multarlos.
Las misivas, enviadas por la Dirección General de Consumo, les ofrecerán información y asesoramiento para que su contenido comercial se ajuste a la normativa europea, ya que la inspección entiende que muchas de estas infracciones pueden deberse al desconocimiento. Así, en una primera fase, el ministerio apuesta por la pedagogía y dará información que permita a los 'influencers' corregir las conductas inadecuadas y respetar la legislación europea que busca desterrar las prácticas de venta desleales. No obstante, les deja claro que, a partir de este momento, si no rectifican, inaugurará la vía de las sanciones.
En paralelo, Consumo también se pondrá en contacto con las empresas y marcas que están detrás de las comunicaciones comerciales por internet para, de igual manera, informarles de los incumplimientos en que están incurriendo y de las responsabilidades de todo tipo que les exigirá si no rectifican.
Los infractores son referentes digitales con un gran número de seguidores, que están activos en varias redes sociales y en distintos sectores como la moda, los viajes o el estilo de vida. La inspección concluye que tres de cada cuatro de los algo más de 40 'influencers' españoles investigados incumplen uno o varios preceptos de las normas europeas de protección al consumidor.
La mayoría de estos referentes no utiliza las etiquetas que proporcionan las plataformas para indicar al lector que se trata de contenido publicitario (por ejemplo "colaboración pagada"), usan términos muy genéricos como "publi" o "ad" (abreviatura de la palabra inglesa "advertisement") o, simplemente, se limitan a un agradecimiento genérico a la marca asociada, dificultando al consumidor medio la posibilidad de identificar que está ante contenido comercial o publicitario.
La investigación se realizó en colaboración con los responsables autonómicos de protección al consumidor de Cataluña, Baleares y Madrid y fue coordinada por la Oficina de Enlace Única española de la Red Europea de Cooperación para la Protección de los Consumidores. La operación forma parte de una batida continental, en la que participaron 22 Estados miembros, Noruega e Islandia bajo la coordinación de la Comisión Europea. En total, se revisaron las publicaciones de 576 'influencers'. El 97%, la práctica totalidad, utilizaba o publicaba contenido comercial, pero solamente uno de cada cinco de ellos se ajustaba a la ley en estas comunicaciones.
Seguidores vulnerables
El Ministerio de Derechos Sociales considera se trata de una actuación "particularmente relevante" ya que, en la actualidad, en el entorno 'online', y muy especialmente en las redes sociales, los consumidores se enfrentan a menudo a mensajes publicitarios de 'influencers' que no son claramente identificables, o incluso se trata de marketing encubierto, por lo que pueden inducirles a error o engañarlos. Estas conductas son infracciones graves porque, en numerosas ocasiones, los mensajes manipulados van dirigidos a un grupo de consumidores especialmente vulnerables como son los jóvenes.
El objetivo de la macrooperación continental es que el comercio 'online' sea igual de seguro y ofrezca las mismas garantías a los consumidores que el presencial. Blindar la legalidad de la publicidad en redes sociales es hoy una de las prioridades comunes de las autoridades europeas en materia de protección al consumidor, recordó un portavoz ministerial.
