economía
La victoria de David contra Goliat de una empresa familiar zaragozana de hoteles
La justicia europea ha dado la razón por el uso de una marca a Fantasía Hotels & Resorts, que gestiona dos establecimientos en Alcocéber, frente al gigante Levantur, una de las diez cadenas más grandes de España.
La batalla por el uso de una marca ha terminado con victoria para una pequeña empresa hotelera de Zaragoza, frente a uno de los gigantes del sector. Un caso de David contra Goliat que ha resuelto el Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) dando la razón a la marca Fantasía Hoteles, propiedad de una compañía familiar con sede en la capital aragonesa, que podrá seguir utilizando en exclusiva su nombre, mientras este no podrá aparecer en los hoteles de Levantur de su enseña Bahía Príncipe.
El citado órgano de justicia europeo ha dictado dos sentencias por las que se desestiman los dos recursos planteados por Levantur a lo largo de los últimos años en los que se ha prolongado el conflicto por el uso de la palabra "fantasía" en la denominación de los establecimientos Fantasía Bahía Príncipe (Tenerife) y Luxury Bahía Príncipe Fantasía, ya que "existía un riesgo de confusión" con la marca zaragozana.
Fantasía Hoteles, la primera en registrarlo
La zaragozana Fantasía Hoteles se creó en 2008 y gestiona dos hoteles en Alcocéber (Castellón), el Gran Hotel Las Fuentes y Villas Dulcinea, muy conocidos entre los aragoneses que viajan a la Costa del Azahar. Levantur solicitó la inscripción de registro de la marca 'Fantasía Bahía Príncipe Hotels & Resorts', un complejo hotelero de cinco estrellas, en el año 2017 y fue registrada en 2018.
En este caso, ha quedado probado que la aragonesa fue la primera en registrar la palabra 'fantasía' como marca, por lo que se declaran nulas las que registró después Levantur, según han explicado desde el despacho Pons IP que ha representado a la zaragozana. "Fantasía Hoteles solicitó a la EUIPO (Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea) que anulara dichas marcas por ser incompatibles con su nombre comercial anterior", ha explicado Jorge Vicente Martínez, abogado del área de litigios de propiedad industrial del citado despacho. La oficina le dio la razón, pero el gigante hotelero, entre los diez más grandes de España, recurrió.
Levantur argumentó que el uso que hacía la marca aragonesa era "residual y accesorio" y que solo tenía visibilidad en un ámbito local. Sin embargo, el tribunal entiende que no lo es, por las pruebas aportadas como catálogos publicitarios. Estas demuestran para el órgano que el nombre se asocia de manera "suficientemente visible y constante" y que se ve en numerosos sitios de reservas de alojamientos donde el Gran Hotel Las Fuentes "aparece unido al 'de Fantasía Hoteles'", además de en la cartelería en varias zonas del establecimiento. Este se utiliza también en "todos los productos utilizados habitualmente para el funcionamiento del hotel", desde los formularios a los champús, bolsas o peines que se regalan a los clientes.
El TGUE ha confirmado en su sentencia que el término "fantasía", presente en las marcas anuladas y en el nombre comercial anterior, "posee carácter distintivo por no presentar ningún vínculo directo con los servicios hoteleros", ha señalado el abogado. Se utiliza incluso la definición de la palabra según la Real Academia de la Lengua Española (RAE) para explicar que su significado "guarda una relación con el concepto de imaginación, por lo que no presenta ningún vínculo directo con los servicios en cuestión".
Aunque las marcas impugnadas presentan otros elementos, el TGUE los considera elementos "que por su posición y menor tamaño en el conjunto ven disminuido su peso, o bien, elementos que resultan descriptivos o débiles", añade el abogado. En particular, por lo que respecta al elemento de 'bahía príncipe' de la marca de Levantur, "una parte significativa del público pertinente lo percibirá como una indicación del lugar en el que se prestan los servicios hoteleros, lo que hace que su carácter sea escasamente distintivo". En este sentido, la sentencia realiza un análisis exhaustivo incluyendo la comparación visual, fonética y conceptual de la marca y su percepción por los usuarios.
Finalmente, el tribunal europeo aprecia "un grado medio de similitud conceptual entre dichos signos". Así, concluye que el público "percibiría este elemento en el sentido de que designa a un conjunto de hoteles pertenecientes al grupo reunidos bajo el término 'fantasía'", resume el abogado del despacho Pons IP. Teniendo todo ello en cuenta el tribunal dedujo que "existía un riesgo de confusión que justificaba la nulidad de las marcas controvertidas".
El abogado destaca que este fallo es "especialmente relevante para casos en los que las marcas impugnadas se componen de un pluralidad de elementos denominativos y figurativos, en diversas posiciones y tamaños". De la sentencia se deduce que "es preciso examinar la distintividad y qué papel tiene cada elemento en el conjunto, así como atender al equilibrio general entre los diversos elementos constitutivos de las marcas en conflicto". En este caso, las diferencias han tenido un impacto limitado frente a la coincidencia del elemento 'fantasía', dotado de carácter distintivo para servicios hoteleros, "que ha resultado determinante en la apreciación del riesgo de confusión", ha recordado.
¿Quién es Fantasía Hoteles?
Fantasía Hoteles es la marca de Fantasía Hotels & Resorts del grupo zaragozano Ainturban. Los orígenes de la matriz se remontan a 1982, cuando la familia Egido fundadora creó la mayorista de viajes Rhodasol-Turimar y la red de agencias de viajes Tívoli. Unos años después de vender estas últimas en 2002 la familia entró en el sector hotelero. Actualmente la sede se encuentra en Zaragoza, donde radican las oficinas de Ainturban, grupo que opera también en el sector inmobiliario, al frente del que se encuentra la segunda generación. La compañía está asociada a la Empresa Familiar de Aragón (AEFA).
