Preacuerdo en el convenio del Metal de Zaragoza refrendado por UGT y CC. OO.
Afecta a 70.000 trabajadores con el 3% de subida desde el 1 de julio, otro 3% en los años 2024 y 2025; y el 2,5% para 2026. Incluye 6 días de flexibilidad y 60 euros al mes de plus de distancia para los nuevos contratatados en este sector
Con una subida salarial del 3% para 2023 -a aplicar desde el 1 de julio-; otro 3% para 2024 y 2025 y un 2,5% para 2026, se cerró en la madrugada del viernes, tras muchas horas de negociación, el preacuerdo para el convenio provincial del Metal de Zaragoza. Es uno de los más importantes al fijar las condiciones de trabajo de 70.000 empleados y 3.000 empresas durante 4 años.
Según informaron desde la secretaria general de la Federación de Empresarios del Metal de Zaragoza (FEMZ), el preacuerdo de convenio para el sector industrial, ratificado ayer por asambleas de trabajadores convocadas por UGT y CC. OO., recoge también seis días de flexibilidad al alza o a la baja para una mejor planificación de las empresas, así como un cambio en el plus de distancia que si en el convenio anterior se pagaba de acuerdo al kilometraje (0,29 euros por km) que tenía que hacer cada trabajador para desplazarse a su puesto, a partir del 1 de enero de 2024, será fijo de 60 euros al mes para los nuevos que se incorporen a este sector.
En 2025 será de 61 euros al mes y en 2026 de 62, si bien a los empleados veteranos se les mantendrá como estaba en el convenio anterior ya que supone mayor retribución.
En cuanto al incremento del 2,5% para 2026 «en caso de que finalizado ese año, la subida pactada fuera inferior al índice de precios al consumo (IPC) real, «el exceso será incluido en la base de cálculo para elaborar las tablas salariales del año siguiente» de tal forma que recoja el «pago de atrasos que superen el 130% del incremento de 2026 (3,25)».
El texto del preacuerdo del Metal en Zaragoza -con una subida salarial para la segunda mitad de este año inferior al 4% firmado en el acuerdo por el empleo y la negociación colectiva (AENC)- establece además una paga de 400 euros, que se abonará el 30 de enero de 2026 a trabajadores a jornada completa o su importe equivalente según las horas de jornada para todos aquellos que permanezcan en la empresa a fecha 31/12/2025 con la excepción del personal jubilado y contratos temporales que terminen.
Asimismo, el preacuerdo resta 8 horas de jornada laboral pasando de 1.760 al año a 1.752 en estos cuatro años y añade dos referencias al convenio estatal del Metal: que los contratos temporales se amplíen de 6 a 12 meses y que las empresas puedan destinar una parte de las subidas salariales a planes de pensiones.
Pendiente de recibir mañana el vistobueno del comité de la FEMZ, el preacuerdo incluye otra novedad. «Si hasta ahora los convenios recogían una garantía de mínimos de subida salarial, ahora será de máximos de acuerdo a cada categoría profesional», es decir, se topan estas subidas y se aplicarán solo al salario de tablas y no al global de la retribución del trabajador que es superior al incluir otros complementos.
La patronal del Metal trata de evitar así que vuelva a repetirse lo sucedido este 2023 en el que las empresas han tenido que abonar, según la FEMZ, un 10% de aumento salarial por atrasos y una paga compensatoria de 1.600 euros.
«Da estabilidad a las empresas», asegura la patronal
Desde la FEMZ explicaron que este preacuerdo de convenio provincial del Metal de Zaragoza «da estabilidad a las empresas y algo de oxígeno». Indicaron además que «hay que verlo en su conjunto ya que aunque incluye algunas cesiones por parte de los sindicatos, hay otras desde la patronal como reducir la jornada anual en ocho horas durante la vigencia del convenio o pasar al salario el complemento ex-categoría de oficial de tercera, de unos 100 euros, para que así cuente también a la hora de calcular las subidas cada año.
Los sindicatos mayoritarios valoraron el preacuerdo como equilibrado, refrendado ayer por sus bases. Sin embargo, desde OSTA, que no ha participado en la negociación, lo calificaron de «retroceso por la flexibilidad gratis que da a las empresas, unas subidas inferiores a las del AENC y el fuerte recorte al plus de distancia».
