Un recurso con gran potencial de desarrollo
Varias organizaciones vinculadas a la micología trabajan desde distintas vertientes en el objetivo de impulsar el desarrollo rural de zonas en las que abundan las setas.
El Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA) ha puesto en marcha, junto a varias organizaciones, el proyecto ‘Fungalia: Alianza territorial para la co-innovación micológica como motor de desarrollo rural sostenible frente al reto demográfico’. Cuenta con el asesoramiento científico de Fernando Martínez Peña y Rubén Escribano, investigadores del departamento de Sistemas Agrícolas, Forestales y Medio Ambiente del CITA.
"En Aragón existen catalogadas alrededor de 2.400 especies micológicas, no todas comestibles, pero que pueden tener otros usos, por lo que tenemos un gran potencial para desarrollar este recurso a través de diversas vías, del que todavía hay un cierto desconocimiento", explica Fernando Martínez Peña.
Fungalia contempla entre sus objetivos "promover los parques micológicos y el intercambio de buenas prácticas mediante la consolidación y ampliación de estructuras administrativas destinadas a formalizar e impulsar actividades conjuntas de desarrollo del sector micológico forestal", detallan desde el proyecto. Para ello, desde el CITA colaborarán en la elaboración tanto de los planes técnicos como de los reglamentos internos "con criterios científicos que aseguren una planificación sostenible de los recursos micológicos".
El potencial productivo, en función de umbrales de datos que manejan desde el centro, y la capacidad de atracción son los principales criterios que se consideran para poder crear parques micológicos.
Además de para consumo, las setas pueden emplearse en ámbitos muy diversos, que van desde la construcción hasta los embalajes. Por ello, desde Fungalia pretenden fomentar el emprendimiento y dinamización de la actividad empresarial rural de nuevos modelos de negocio sostenibles e inclusivos basados en la co-innovación micológica.
No obstante, desde el el sector, "echamos en falta la posibilidad de transformar el producto silvestre en el propio territorio para que, por ejemplo, los turistas que visitan esas zonas puedan llevarse un pequeño recuerdo", apunta Martínez Peña.
El proyecto también busca desarrollar e innnovar en el territorio, para ello, trabajarán en el desarrollo de diversas iniciativas como marcas de calidad que permitan asociar un producto a un territorio determinado.
Ciencia ciudadana
Y, por último, se desarrollará una web que facilite el proceso de coinnovación a partir de la ciencia ciudadana a través del uso de app específicas para la mejora del conocimiento y la gestión del recurso micológico. Un conocimiento que no se quedará allí, sino que, al igual que todos los datos que genere esta iniciativa podrá ser explotada científicamente para elaborar diversos documentos, informes…
El proyecto, que comienza este mes de enero y finalizará en junio de 2024, ha recibido una subvención de 187.998 euros y está coordinado por la Comunidad de Albarracín. El equipo de trabajo lo forman la Asociación de Parques Micológicos de Aragón, Mico Aragón, el CITA y Qilex Consultoría Forestal. Está subvencionado por el Ministerio para la Transformación Ecológica y Reto Demográfico dentro de la convocatoria de subvenciones para la financiación de proyectos promovidos por Entidades Locales para la innovación territorial, la reactivación de la actividad socioeconómica y la lucha contra la despoblación.
