Ibercaja propone rebajar las salidas de 790 a 750 trabajadores y el cierre de oficinas de 220 a 208

La dirección de Ibercaja presentó este viernes a la representación sindical una nueva propuesta para la negociación del ERE en la que se recoge una rebaja tanto del número de trabajadores afectados como del cierre de oficinas. Así, la oferta de la entidad recoge un descenso en el número de salidas, que pasan de las 790 planteadas inicialmente a las 750 propuestas ahora. También serían menos las oficinas que terminarían cerradas, cuyo número se rebaja de las 220 propuestas en un principio a las 208 que incluye la oferta presentada ahora por la entidad.

La propuesta que llevó la entidad a la mesa de negociación este viernes mantiene las indemnizaciones establecidas, pero incluye también una mejora. La dirección de Ibercaja ya había ofrecido a los representantes sindicales la posibilidad de que se acojan al expediente de regulación de empleo (ERE) trabajadores de la entidad con 56 años o más. El banco planteó entonces salidas a empleados nacidos en 1963 y 1964 con el 60% del salario hasta que cumplan 63 años, con el 65% del sueldo a los nacidos en 1961 y 1962 y con el 70% a los de 1958, 1959 y 1960. En la propuesta de hoy mantiene las condiciones económicas, pero además ha incluido a aquellos trabajadores nacidos en 1965, es decir, los que cumplirían los 56 años el próximo año.

Voluntad de diálogo

Fuentes de la entidad destacaron que Ibercaja confía en seguir acercando posturas en el proceso negociador para llegar a un acuerdo, cuya fecha límite es el próximo 18 de diciembre. Insiste en su voluntad de encuentro y diálogo y en su intención de primar la voluntariedad y el factor de edad para las salidas.

Las cinco centrales con representación en el banco aragonés (CC. OO., UGT, Apeca Fine, ACI y Asipa), que actúan con unidad sindical, estudiarán ahora la propuesta presentada por la dirección de Ibercaja y ya trabajan para acudir el próximo miércoles a una nueva reunión, en la que tienen previsto continuar detallando sus propuestas, especialmente aquellas que tienen que ver con la movilidad geográfica y las indemnizaciones por salir de la entidad.

Sus representantes destacaron que la oferta presentada muestra la intención de la empresa de avanzar en un acuerdo, pero continuaron manteniendo que las propuestas continúan siendo "muy insuficientes". Los sindicatos quieren que se restrinja al máximo la movilidad de trabajadores que pueda ocasionar el cierre de oficinas y proponen que los empleados afectados por la desaparición de una sede no tengan que trasladarse más allá de entre 25 y 50 kilómetros.

El expediente de regulación de empleo de Ibercaja obedece a razones organizativas, económicas y de producción y se circunscribe a un escenario de crisis marcado por la expansión del coronavirus, que ha acelerado la digitalización en el sector bancario y ha incrementado las exigencias de rentabilidad a todas las entidades financieras.