Economía

El Gobierno endurece las condiciones para cerrar la central térmica de Andorra

El decreto que ha activado el Gobierno tendrá retroactividad e Iberdrola tendrá que entregar las cuentas de Lada y Velilla.

Central térmica de Andorra.
Heraldo

El ministro de Energía, Álvaro Nadal, ha respondido al último órdago que le ha lanzado Iberdrola al anunciar la semana pasada el cierre de las dos últimas centrales de carbón que tiene en España con un mensaje en el que ha recordado que es el Gobierno el que tiene la última palabra en esta decisión estratégica y que no se puede prescindir de esta fuente energética de forma tan repentina.

El Ministerio ha activado el Real Decreto por el que regula el cierre de centrales eléctricas, entre las  que se encuentra la térmica de Andorra.

El decreto tendrá carácter retroactivo y pretende asegurar que las decisiones de cierre sean "coherentes con los instrumentos de planificación energética" y "compatibles con los objetivos en materia de seguridad del suministro, sostenibilidad y precio de la energía".

Este Real Decreto se aplicará a todos los cierres que hayan sido solicitados desde la consulta pública que lanzó el pasado mes de julio sobre este tema y a los que aún no hayan sido resueltos por la Administración. Por ello, ha solicitado a Iberdrola que remita las cuentas de sus plantas térmicas de Lada (Asturias) y Velilla (Palencia) correspondientes a los últimos tres años.

Diferencias con el régimen actual

A diferencia del régimen actual --que solo contempla la seguridad del suministro--, este reglamento también valorará la coherencia del cierre con el cumplimiento de los objetivos medioambientales y del clima, así como la coherencia de los precios y la competencia del mercado eléctrico.

De esta manera, Energía ha explicado que denegará el cierre de una instalación "cuando amenace a la seguridad de suministro eléctrico o a la seguridad del abastecimiento de materias primas, así como cuando suponga efectos desfavorables en los precios de la electricidad, en la competencia en el mercado eléctrico y en el cumplimiento de los objetivos en la planificación de energía y clima vigente".

El reglamento establece como ámbito de aplicación las instalaciones de producción de energía eléctrica de potencia superior a 50 megavatios (MW) con independencia de su tecnología, ya que son las que requieren autorización del propio Ministerio para su operación. Por su parte, las centrales de menor tamaño se regirán por el marco de autorización propio de las comunidades autónomas.

Para obtener la autorización administrativa de cierre de una central, será el titular de la instalación quien deberá entregar la solicitud ante la Dirección General de Política Energética y Minas, acompañada de una memoria justificativa en la que se detallen las circunstancias técnicas, económicas, ambientales o de cualquier otra índole que fundamenten el cierre, información técnica de la instalación y un plan técnico y económico de desmantelamiento.

Una vez recibida la solicitud, será el Ministerio de Energía quien solicitará los correspondientes informes de valoración del eventual cierre a REE, Enagás, CNMC y otros organismos implicados.

La instalación podrá subastarse si se deniega el cierre 

Energía, teniendo en cuenta los informes, resolverá la autorización o denegación de la solicitud. En caso de denegarla, el titular de la instalación deberá continuar con la actividad por sí mismo o transmitir la instalación a un tercero, lo que podrá hacer --si lo desea-- mediante una subasta regulada por el Real Decreto. Esta subasta permitiría establecer si la instalación tiene valor económico para un operador distinto y, siendo este el caso, facilitaría su transmisión para que la central continuase operando.

Además, si el mecanismo de subasta no permite la transmisión a un tercero, podría aprobarse un esquema de compensación por la continuidad de la actividad, que se diseñará para asegurar que se otorga "al menor coste posible" y, en todo caso, con un coste inferior al beneficio económico que los consumidores derivarían de la continuidad de la actividad.

Nadal recuerda que las centrales deben estar dentro del "mix energético"

Nadal recordó este lunes que el sistema necesita mantener las centrales de carbón dentro del 'mix' energético -la composición de las diferentes fuentes eléctricas- y que la decisión de la compañía eléctrica presidida por Ignacio Galán tiene que ser «compatible» con la política energética.

Nadal realizó una defensa de estas centrales al explicar que "el Gobierno sabe y cree que necesitamos el carbón dentro del 'mix'". Además, puntualizó que el anuncio de Iberdrola es "una decisión empresarial", insistiendo en que ante este tipo de anuncios es "siempre" la política la que define la composición de energías que participan en la producción del país.