Panishop, la firma aragonesa cuya tradición panadera se remonta a más de un siglo, mantiene su estrategia de expansión. Ahora ha puesto su mirada en Cataluña, donde acaba de inaugurar un nuevo establecimiento, concretamente en la localidad de Cambrils.

Con esta nueva apertura, la compañía creada y liderada por la familia Rébola, cuenta con 38 tiendas, situadas en su mayoría en Zaragoza (23 establecimientos), pero con importante presencia también en Madrid (10 tiendas), Huesca (1), Tarragona (2), Reus (1) y la recientemente inaugurada en Cambrils. De todas ellas, explicó ayer la compañía en un comunicado, 16 son propias y el resto franquiciadas.

El nombre de Panishop no solo está ligado a la expansión comercial. También a la innovación. De hecho, esta empresa familiar cuyo origen se remonta a 1902 y que abrió su primer establecimiento Panishop en Zaragoza en 1994, es un referente del sector en innovación, gracias a un departamento de I+D+i que ha propiciado el lanzamiento de novedosos productos en los últimos años.

La empresa ha modernizado su obrador con el objetivo de ampliar la producción de su gama de panes sin aditivos, enmarcados en la línea Slow Baking, certificada por el Centro Nacional de Tecnología y Seguridad Alimentaria. Además, está llevando a cabo una remodelación de las tiendas para adecuar la imagen a los valores de Panishop. Está previsto que todas las tiendas estén reformadas a final de año.