Solo vale ganar o ganar

La derrota no es una opción. El Real Zaragoza recibe al Mallorca con la obligación de ganar y conseguir tres puntos que le permitan aferrarse a la lucha por la salvación. Últimos, los aragoneses solo han logrado un empate en los últimos siete partidos. Una pésima racha que les ha hecho encarar una interminable cuesta abajo que debe abandonar antes de que sea demasiado tarde.

Para lograrlo, Javier Aguirre ha confirmado que solo realizará un cambio respecto al once que alineó en Granada. La entrada de Juan Carlos por Lafita será la única modificación en un equipo que, pese a perder, mostró buena cara en su último compromiso liguero. Esto significa que el técnico mexicano repetirá línea defensiva. Aquella que formó tirando de improvisación para jugar en Los Cármenes y que volverá a tener una oportunidad al calor de su público.

Zuculini, Pintér, Lanzaro y Abraham portarán la responsabilidad de estabilizar la zona más crítica del conjunto blanquillo. Cuatro futbolistas que partieron al inicio de la temporada sin la vitola de titulares y que, sin embargo, jugarán en el que se presume como uno de los partidos claves del año. Una de esas finales que el Real Zaragoza parece empeñado en convertir cada año sus encuentros durante las últimas temporadas.

Por delante, la zaga estará apoyada en todo momento por el argentino Leo Ponzio. El capitán vuelve al lugar en el que brilló la pasada campaña, como hombre por delante de la defensa, con la intención de aprovechar al máximo sus cualidades y amplio despliegue. La faceta creativa recaerá, por lo tanto, en Rúben Micael y Luis García. El asturiano, uno de los hombres fuertes del vestuario por personalidad y veteranía, debe dar un paso adelante para ser el hombre clave que se buscaba cuando se le fichó.

Especial preocupación genera la situación actual del ataque. Con solo tres goles a favor en los últimos partidos, los zaragocistas han perdido la mordiente de la que hicieron gala en el comienzo de la competición. Postiga, que repetirá en punta, no encuentra acompañamiento en la difícil tarea de fabricar goles. Algo a lo que le deberán echar una mano Juan Carlos y Barrera por las bandas.

Imagen de Caparrós

Para conseguir los puntos, el conjunto aragonés deberá superar al Mallorca de Joaquín Caparrós. El técnico sevillano, que cogió a los baleares en el pasado mes de octubre, después de que Laudrup decidiera dimitir de su cargo, ha conseguido impregnar de un estilo práctico en el que prima la defensa y la destrucción de la circulación rival. Resultados cortos que le permiten ir sumando para escapar de la zona de abajo.

Los bermellones no podrán contar en su visita a la capital zaragozana con los lesionados Nunes , Kevin y Alfaro. El uruguayo 'Chori' Castro, que era duda tras el pinchazo que sufrió el pasado fin de semana, ha logrado recuperarse y estará en Zaragoza.

Reacción social

El otro gran punto de atención del encuentro se centra en saber cómo recibirá La Romareda a Agapito Iglesias. Tras una semana ajetreada en lo social, con varios comunicados procedentes de diferentes estamentos del tejido social zaragocista, parece clara la predisposición de una parte de la afición en hacer saber su malestar al propietario de la entidad blanquilla.

Cuerpo técnico y jugadores, sin embargo, parecen contar con el plebiscito de sus seguidores, conscientes de que son los encargados de sacar adelante la nave. La certeza de que la existencia del club pasa por conseguir la permanencia en Primera División es ampliamente extendida y todo lo que fuera distraer a los actores principales de su cometido podría significar un tiro en el propio pie de la viabilidad zaragocista. Un escenario que solo admite la victoria como único resultado posible.