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Un final de año exigente para la SD Huesca

Cinco de los seis próximos rivales de los azulgranas están ahora mismo por encima de ellos en la clasificación.

Los jugadores de la SD Huesca saludan a la grada antes del choque con el Leganés.
Los jugadores de la SD Huesca saludan a la grada antes del choque con el Leganés.
Rafael Gobantes

Metida en una racha de cinco partidos sin ganar, situada a tres puntos del descenso y transmitiendo la sensación de que se encuentra en caída libre tras la derrota del viernes antes el Leganés (0-2). La situación de la SD Huesca tras quince jornadas disputadas no es precisamente la prevista y atisba una ardua tarea para su entrenador, Xisco Muñoz, llegado en sustitución de Nacho Ambriz para reconducir la situación y que sabe que que su primera meta es la de levantar al equipo para mantenerlo con constantes vitales hasta la apertura del mercado de invierno, momento en el que se acometerá la tarea de reforzar la plantilla. Hasta entonces, por delante quedan seis jornadas que sobre el papel se antojan exigentes. Salvo en el caso del recibimiento al Alcorcón, el colista, con el que se cerrará el año y la primera vuelta, los demás rivales, Mirandés, Ibiza, Almería, Valladolid y Sporting, se respiran ahora mismo en la tabla por encima de los azulgranas, que son 15º.

El primero con el que se cruzarán es precisamente el que más cercano a ellos, el Mirandés, al que visitan el sábado a las 18.15. Los burgaleses se encuentran justo un puesto más arriba y suman un punto más, 17 por 18. Destacan por su capacidad ofensiva -han marcado 23 goles, los segundos que más tras el Almería-, pero también son débiles atrás -han recibo 26, faceta en la que solo les supera el Alcorcón-. Cuatro son los jugadores que se reparten el peso de conseguir dianas, Camello e Íñigo Vicente, con cinco cada uno, y Brugué y Simón, con cuatro. El sábado cayeron con el Oviedo a domicilio (3-1) y como locales presentan una hoja de resultados de tres victorias, un empate y cuatro derrotas.

El domingo de la semana que viene la cita será con el Ibiza, un recién ascendido que se ha adaptado bien a la competición y que está demostrando ser muy difícil de batir. Es séptimo y solo ha caído tres veces. Acumula cinco victorias (la más reciente el domingo con la Real Sociedad B (0-1) y siete empates con un balance de goles a favor y en contra equilibrado, 18 en cada caso; el del Huesca es de 17 y 17.

Los de Xisco Muñoz cerrarán noviembre el día 27 desplazándose a Almería para verse las caras con el actual líder. Los indálicos, dirigidos por Rubi, les doblan en puntuación y aparentan ser una máquina muy bien engrasada con cinco victorias consecutivas.

De vuelta a El Alcoraz para inaugurar diciembre se dará la bienvenida a otro conjunto dirigido por un ex, el Valladolid de Pacheta, que es quinto. Una semana después tocará medirse al Sporting, octavo, en El Molinón, y por último, antes de que la liga pare por Navidad, El Alcoraz despedirá 2021 con el Alcorcón.

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