Al menos se sumó un punto. La SD Huesca no pasó del 0-0 en la visita del Fuenlabrada a El Alcoraz en un partido que no será recordado precisamente por el espectáculo ofrecido por ambos contendientes, pero que sirvió para cortar la racha de tres derrotas consecutivas de los azulgranas. Exigir a un conjunto con esa trayectoria negativa que de pronto vuelva a deslumbrar quizá sea demasiado, pero si se quiere ganar algún destello es necesario. Ni lo hubo ni se resolvió ninguna de las dudas generadas en la últimas semanas. Habrá que confiar en que el marcador refuerce la confianza porque desde luego en lo que al fútbol se refiere se hace necesario seguir trabajando y mucho.

Los de Ambriz, que por primera vez en este curso se quedaron sin marcar, tuvieron muchos problemas para generar peligro y atrás de nuevo sufrieron para recular en campo abierto. De hecho un porcentaje muy elevado del punto retenido se le debe a Andrés Fernández, muy acertado esta vez.

La primera parte resultó plana y la segunda más abierta, aunque también más bronca. Los azulgranas terminaron con uno menos por la expulsión de Gaich, que vio su segunda amarilla a falta de ocho minutos, y a partir de ahí se tuvieron que centrar en no perder.

En los 45 minutos iniciales, al igual que en los que les seguirían, el Huesca no encontró la llave del candado de un Fuenlabrada que no tuvo la posesión ni falta que le hizo. Como se esperaba, los madrileños se encerraron atrás, donde se les vio cómodos, y aprovecharon las veces en las que se atrevieron a estirarse, primero tímidamente y luego con firme decisión, para dar escalofríos a sus contrincantes.

Recordando los buenos comienzos de las dos victorias en las dos primeras jornadas, los quince minutos iniciales fueron de completo dominio local. El Huesca robaba muy arriba y no daba respiro a los de Oltra, que sin embargo no perdieron la compostura. Hubo que esperar diez minutos para ver cierto peligro en la meta de Altube. Fue en un córner en el que Seoane disparó alto desde la frontal. La siguiente aparición oscense con auténticas intenciones no se vivió hasta casi un cuarto de hora después. Nwakali filtró un pase que recogió Ferreiro para cruzarlo al poste contrario, se fue fuera por poco y tampoco Pitta llegó a contactarlo. Más allá de varios saques de esquina que resultaron inocuos, poca producción ofensiva más se pudo reseñar para los locales hasta que el colegiado Arcediano Monescillo mandó a todos a los vestuarios

Para afrontar el partido Ambriz optó por regresar a lo que le había funcionado antes de entrar en la actual sequía de victorias, el trivote en la medular. Con respecto a la derrota del lunes anterior en Lugo (3-2) realizó cinco cambios en la alineación. Por primera vez pudo juntar a sus dos centrales natos, Pulido y Miquel, que fueron escoltados en los laterales por Ratiu, que cogió el testigo de Buffarini, y Mateu, que retrasó su posición para compartir el perfil zurdo con Ferreiro. Por el lado contrario atacó Escriche y en la sala de máquinas los compañeros de Seonae fueron Nwakali y Mikel Rico. Arriba debutó como titular Pitta.

El medio nigeriano tuvo mucho contacto con el cuero, pero no siempre eligió bien. La incorporación de Ratiu, abarcando todo el carril, facilitó que Escriche se fuese hacia el centro y a Pitta se le vio participativo e indeciso. El equipo lo intentó abriendo el juego a las bandas y con pases en largo, pero no hubo manera.

El Fuenlabrada marcó sobrepasado el cuarto de hora, lo logró Iban Salvador, un agitador, pero estaba en fuera de juego y de nada sirvió a efectos de marcador; sí para meter el miedo en el cuerpo a los locales, más precavidos a partir de entonces. Los visitantes atacaron en el primer periodo principalmente a balón parado, con Pedro León como ejecutor y forzando ya entonces a que Andrés se luciese.

El segundo acto se puso en marcha movido. En una acción entre Pitta y Escriche, el ‘Vikingo’ acarició el gol y acto seguido Pedro León respondió en el área contraria. Sin embargo, el panorama general siguió sin variar. El Huesca no rompía las líneas, había demasiada conducción y pocos pases verticales.

Antes de alcanzar la hora de juego, Ambriz llamó a Gaich para que cogiese el testigo de Mikel Rico. Con ese primer cambio, al que siguió un nuevo despeje de Andrés, esa vez a tiro de Pol Valentín, el técnico situó sobre el césped a los tres delanteros con los que cuenta. Curiosamente ninguno terminó el partido.

Una buena carrera de Seoane acabó en saque de esquina tras un tiro ladeado de Pitta. El choque se endureció y enardeció. Konate testó una vez más a Andrés y en un triple cambio Nwakali, Ferreiro y Pitta dejaron sus puestos a Miguel, Juan Carlos y Joaquín.

Gaich vio su segunda amarilla y sobre el minuto 90, con el claro objetivo de guardar el punto mientras el Fuenlabrada seguía estrellándose con Andrés, se fue Escriche y entró Mosquera. La última fue para los locales, una falta lateral que botó Mateu y cabeceó Mosquera a las manos de Altube. Ahí murió el partido. El siguiente test llegará pronto. El Huesca debe visitar el viernes al filial de la Real Sociedad.

La Liga

Ficha técnica

SD Huesca: Andrés, Ratiu, Pulido, Miquel, Mateu, Mikel Rico (Gaich, 57), Seoane, Nwakali (Miguel, 71), Ferreiro (Joaquín, 71), Escriche (Mosquera, 90) y Pitta (Juan Carlos, 71)

CF Fuenlabrada: Altube, Iribas, Pulido, Diéguez, Pol Valentín, Pedro León (Zozulia, 76), Nuno Pina (Sotillos, 30), Cristóbal, Konate, Ibán Salvador (Cheick, 85) y Kanté (Soldano, 45).

Árbitro: Arcediano Monescillo, Comité de Castilla La Mancha, amonestó a los locales Pitta (67), Pulido (78) y a los visitantes Iban Salvador (74) y Sotillos (75). Expulsó con doble amarilla al azulgrana Gaich (67 y 82).

Incidencias: Partido correspondiente a la sexta jornada de liga de Segunda División disputado en El Alcoraz ante 5.183 espectadores. Tarde soleada y temperatura agradable.