Sube la marea: Iago Aspas vuelve a amenazar a la SD Huesca

Sube la marea. Cuidado. La amenaza viste de color celeste y responde al nombre de Iago Aspas. Tiene la intención de tragarse este domingo a la SD Huesca. La estrella del Celta de Vigo será la principal amenaza por su calidad y por costumbre, puesto que ha marcado seis goles a los azulgranas en cinco enfrentamientos. Uno de los depredadores más implacables a los que se ha enfrentado el equipo en los últimos años; le iguala Jorge Molina, ahora en el Granada.

El delantero de 33 años, además, tiene una cuenta pendiente con el gol: no marca en la Liga desde la visita del Huesca a Balaídos el pasado 30 de diciembre. No se ha estrenado en lo que va de 2021 y quiere que El Alcoraz suponga una vuelta a la esencia. La sequía del ‘príncipe de las bateas’ está justificada porque de los nueve encuentros posteriores se ha perdido cuatro.

Aspas sufrió el 2 de enero, tres días después de enfrentarse a los aragoneses, una lesión que le obligó a retirarse del partido de los suyos ante el Real Madrid en Valdebebas. Se perdió después los compromisos con Villarreal, Real Betis y Eibar y reapareció en Granada. Aún se perdió una jornada más, ante el Valencia, por ver la quinta amarilla. Así, su concurso en lo que va de año se ha reducido a cinco apariciones en las que no ha marcado y sí dado una asistencia. El Celta se ha resentido en parte, pues en todo este tramo solo ha ganado al Elche en Balaídos. El punta ha visto cómo se resentían sus registros goleadores y se mantiene anclado en los nueve que alcanzó ante el conjunto entonces entrenado por Míchel Sánchez.

Entonces era el ‘pichichi’ nacional y ya le han rebasado Gerard Moreno (Villarreal), Mikel Oyarzabal (Real Sociedad) y los levantinistas José Luis Morales y Roger Martí. En busca de sí mismo, Aspas se reencuentra con una víctima recurrente. Le marcó el segundo gol en el duelo de la primera vuelta, tras el de Nolito y antes de que Seoane recortase distancias. Aspas y el Huesca se saludaron por primera vez en el curso 2011-12, en la categoría de plata, con un doblete en la derrota por 4-0 del cuadro entonces dirigido por Quique Hernández.

En la anterior experiencia en la máxima categoría volvió a ser un quebradero de cabeza con otros dos tantos en el 2-0 de tierras gallegas y otro más en el 3-3 de El Alcoraz. Son partidos con muchos goles -solo uno ha terminado con 0-0- y con el papel preponderante de un jugador al que se debe anular el domingo.