El partido de la SD Huesca en San Mamés, “especial y raro” para Mikel Rico

“Especial y raro” será para Mikel Rico el partido de este viernes ante el Athletic de Bilbao (21.00, Gol). Porque jugó seis años con la zamarra rojiblanca y porque acudirá por primera vez al remozado estadio de San Mamés como visitante. Lo hará con una SD Huesca que quiere prolongar las victorias ante Alavés en la Liga y Marchamalo en la Copa del Rey; esta última, aunque discreta, que sirve para prolongar la senda ganadora en el apretado mes de diciembre. El centrocampista, que descansó el martes, ve plausible la llegada del tercer triunfo seguido antes sus viejos compañeros, que ese mismo día cayeron con el Real Madrid por 3-1.

El vizcaíno, de 36 años, nunca jugó en la cantera de los leones. Sí lo hizo en el Basconia, que ejercía como segundo filial, antes de iniciar una trayectoria por el fútbol modesto que empezó en el filial del Conquense y siguió por Poli Ejido y SD Huesca en su primera etapa. Después recalaría en el Granada, con el que pudo debutar en Primera con 26 años antes de cumplir el sueño de incorporarse a un Athletic con el que fue campeón de la Supercopa de España en 2015. “Desde que entre hasta ir al vestuario visitante en vez de al local será diferente. Pero una vez que pita el árbitro te olvidas de todo”, ha señalado tras la sesión de trabajo de este miércoles.

En el vestuario azulgrana se ha instalado una necesaria sensación de alivio después de que llegara el primer triunfo del curso, fundamental para que las cuentas salgan en los siguientes compromisos. “Empezábamos una fase de cinco partidos, contando Granada, para sumar nueve o diez puntos y llevamos cuatro de seis. Si conseguimos dos victorias sería bueno, pero creo que el equipo compite en todos los encuentros y podemos imponernos en los tres. Vamos partido a partido”, ha reflejado el futbolista.

La victoria ante el Alavés, “te da ese punto de tranquilidad y refuerzo que se necesita. Sabes que haces las cosas bien pero si ganas tienes esa confianza en lo que estás haciendo”, ha reflexionado una pieza fundamental para el técnico Míchel Sánchez. Rico, tras superar los problemas físicos que le hicieron perderse cinco de las nueve primeras jornadas, se estrenó como goleador en el estadio de otro exequipo y apunta a San Mamés del mismo modo que los compañeros que no viajaron a Marchamalo.

El vizcaíno entiende el discreto partido de los teóricos suplentes: “Los choques de Copa del Rey son siempre complicados. Todos hemos jugado en los dos lados y cuando militas en un club de Segunda B o Tercera plantas cara y si tienes 15 minutos buenos te vienes arriba. Fue un partido difícil que el equipo sacó adelante y estamos en la siguiente ronda que era lo importante”. La SD Huesca se halla inmersa en una semana de cuatro encuentros que continuará el viernes en Bilbao y el martes 22 de diciembre ante el Levante en El Alcoraz. “Venimos en una buena dinámica, ya lo demostramos en el encuentro de Granada, y vamos a Bilbao a por los tres puntos”, señala con ambición.

Mikel Rico define al Athletic como “un rival intenso, intenso, intenso. Defiende bien y concede poco, todos sabemos de la calidad de sus futbolistas de ataque”. No cree que pueda afectarle el encuentro de Valdebebas; al contrario. “Salieron reforzados por jugar desde el minuto 13 con uno menos y llegar vivos al final, empezaron perdiendo y empataron y dispusieron de una oportunidad para igualar en el último minuto. Anímicamente no estarán muy tocados”, ha considerado el vasco.

Sandro sigue trabajando al margen

La plantilla azulgrana se ha entrenado este miércoles en el IES Pirámide con los futbolistas que actuaron en la Copa y los que se quedaron en la capital, a los que ya se ha añadido el meta Ander Bardají para hacer las veces de tercer portero mientras Antonio Valera se recupera de la lesión. El delantero Sandro Ramírez se ha seguido ejercitando al margen, por lo que su concurso en San Mamés sigue en el aire.